2020 será un año para olvidar en la economía mexicana, pero eso no implica que los riesgos desaparezcan en 2021, ya que hay factores externos que debilitarían aún más al país en caso de suceder, y lo peor es que México no puede hacer nada para evitarlos.
Pero hay una buena noticia, el gobierno federal, a través la secretaría de Hacienda, ha detectado 4 señales de alerta provenientes del exterior, por lo que el país puede prepararse para reducir daños colaterales.
Los riesgos son que la economía de Estados Unidos crezca a un ritmo más lento del esperado a causa de nuevos rebrotes de coronavirus, el retraso de una vacuna para el Covid, un aumento de las tensiones comerciales entre EU China y la incertidumbre provocada por el proceso electoral en el país vecino.
Estos factores tendrán impacto en el precio internacional del petróleo y en el tipo de cambio peso-dólar.
“El precio del crudo para 2020 se había establecido es 49 dólares por barril y vimos que estuvo incluso unos días en precios irrisorios (-2.37 dólares el barril). Para 2021 se estableció el precio de la mezcla mexicana en 42 dólares", dijo Ignacio Martínez, coordinador del Laboratorio de Comercio, Economía y Negocios (LACEN) de la UNAM.
“Vamos a ver la terminación del acuerdo entre Arabia Saudita, Rusia –la OPEP- y Estados Unidos, donde México puede ser extremadamente afectado, pues eso va a provocar que el precio internacional del crudo tenga una reducción”, advirtió.
Sin embargo, el especialista aseguró que el factor de riesgo más importante es no tener la vacuna para el Covid-19.
Luz del Carmen Díaz Peña, profesora de la Escuela de Negocios del Tecnológico de Monterrey, dijo que por ahora el tipo de cambio se ha mantenido estable, incluso se ha apreciado, de casi 25 pesos ha logrado estar en 21 pesos, y así se espera que se mantenga para el próximo año: "Esto es pura fortaleza, digámoslo así, porque tenemos una moneda que no se ha depreciado más y esto nos beneficia para próximas exportaciones o tratados con otros países", añadió.
Ambos expertos coincidieron en la importancia de que la administración federal sea más eficiente en materia de recaudación, así como evitar subejercicios e incentivar la inversión pública.
La secretaría de Hacienda estima que luego de que el PIB mexicano caiga 8% este año, para 2021 habrá un rebote de 4.6%.
“El presupuesto para 2021 tiene tres ejes muy importantes: el gasto social en torno a los programas que el gobierno está impulsando hacia poblaciones vulnerables; el gasto en salud y el gasto en inversión pública para invertirlo en infraestructura”, detalló el investigador de la UNAM.
Pemex y los recursos que el gobierno federal destina a la empresa petrolera son una de las grandes preocupaciones de los analistas.
"La aportación presupuestaria debería de concentrarse preponderantemente en exploración y producción petrolera y ser complementada con la reactivación de los farm-outs. Lo anterior resultaría en una menor presión para las finanzas públicas al potenciarse la inversión en exploración y producción petrolera", apuntó recientemente BBVA México.
Dada la estrecha relación económica y comercial entre México y Estados Unidos, lo que pase con el vecino del norte, para bien o para mal, se sentirá del lado mexicano.
La carrera electoral entre Joe Biden y Donald Trump, que busca un segundo periodo en la Casa Blanca, repercutirá –se vio hace cuatro años-, así como la relación entre las dos principales economías del mundo.
“Que se cierren las fronteras de negociación y comercio entre esos dos países. A ninguna potencia le conviene que continúe el conflicto ni que haya inestabilidad política o que haya mayor riesgo porque puede ocasionar fuga de capitales”, aseguró Díaz Peña.
Si EU no logra en el tercer trimestre, especialmente en septiembre, un crecimiento como el que tenía a principio de año, antes de las medidas de aislamiento por la pandemia, “puede desalentar la inversión”, sin embargo, “hay un anuncio importante a destacar, el que hizo la Fed hace dos semanas, que va a dejar de lado el combate a la inflación y se va a concentrar en la creación de empleos. Esto va a empujar a la economía de Estados Unidos”, sostuvo Ignacio Martínez, del LACEN.
