Economistas encuestados por Reuters habían previsto que se generarían 850,000 posiciones nuevas en septiembre.
La economía había mejorado en junio tras la reapertura de la actividad, cuando las nóminas no agrícolas saltaron a un récord de 4.781 millones de empleos nuevos.
La tasa de desempleo bajó a 7.9% en septiembre desde el 8.4% de agosto. Tal como en meses anteriores, la tasa de desocupados está alterada por muchas personas que se describieron a sí mismas equivocadamente como "empleadas, pero ausentes del trabajo".
El presidente republicano Donald Trump, que anunció el viernes que dio positivo por coronavirus, posiblemente elogiará el avance de empleos y la menor tasa de desocupación como una señal de progresos de su gobierno después de que la economía entró en recesión en febrero.
Pero el crecimiento de los empleos de septiembre fue el más débil desde que comenzó la recuperación en mayo y dejó al mercado laboral bastante lejos de recobrar los 22.2 millones de trabajos perdidos en marzo y abril, lo que indica que la actividad se seguirá desacelerando en el cuarto trimestre.
El ex vicepresidente Joe Biden, candidato del Partido Demócrata a la presidencia, culpa por la turbulencia económica a la forma en que la Casa Blanca ha manejado la pandemia, que ha causado la muerte de más de 200,000 personas e infectado a más de 7 millones en el país.
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El reporte del gobierno del viernes indicó que todos los sectores de la economía crearon empleos en septiembre, a excepción del gobierno, que recortó 216,000 posiciones por la salida de trabajadores temporales de la Oficina del Censo y despidos en departamentos de educación estatales y locales porque muchos colegios se enfocaron en las clases online.
Las nóminas no agrícolas ahora están 10.7 millones por debajo de los niveles prepandémicos. La caída de la tasa de desempleo el mes pasado reflejó a las personas que dejaron la fuerza laboral. Hubo 3.8 millones de personas que reportaron haber perdido sus trabajos de manera permanente, un alza respecto a los 345,000 de agosto.
Otro informe divulgado por el gobierno, esta vez desde el área industrial, indicó que los pedidos a las fábricas estadounidenses subieron 0.7% en agosto frente al alza de 6.5% de julio. Los economistas encuestados estimaban un aumento de las órdenes de 1%.
