Si los pronósticos del gobierno federal se cumplen, México habría recibido 40,574 millones de dólares en 2020, un incremento de 11.3% respecto a 2019.
"Nuestra proyección es que vamos a llegar a más de 40,000 millones de dólares. Es una derrama económica importantísima y por eso no se nos cayó el consumo", dijo el presidente en su habitual conferencia matutina.
Un análisis publicado recientemente por BBVA México señala que las remesas en efectivo y especie ya no tienen la misma importancia relativa que hace 25 años. Mientras en 1995 representaron 8.1% del total de las remesas a México; actualmente, durante los primeros 10 meses del 2020, significaron solo 0.7% del total.
El reporte también señala que los receptores de las remesas en México generalmente son familiares o conocidos de la persona que manda recursos desde el extranjero.
"En muchos casos, los hogares que reciben remesas tienen a uno o más miembros de su familia nuclear o extendida que han migrado a Estados Unidos, y que se encuentran trabajando en ese país, ya sea de forma documentada o no documentada. El motivo para el envío de las remesas se cierne sobre un conjunto de acuerdos informales de carácter familiar, cultural, social y comunitario entre las personas que envían este recurso y las que la reciben", apunta.