"Estamos convencidos que necesitamos la inversión privada, somos aliados de los inversionistas nacionalistas y también de los inversionistas extranjeros que nos respetan", dijo Armenta, en una entrevista con Reuters, atribuyendo su nueva postura al haber estudiado los marcos regulatorios en otros países.
El proyecto de ley será presentado en septiembre con el inicio de un nuevo periodo legislativo, tras las elecciones intermedias del 6 de junio, que renovarán la Cámara de Diputados.
La secretaria de Economía, Tatiana Clouthier, declaró el mes pasado que el gobierno mexicano estaba considerando una asociación público-privada para desarrollar el litio. Sugirió que el Estado podría tener una participación de 51%, un esquema que Armenta también apoya.
En el sector energético, las grandes petroleras privadas han preferido en su mayoría evitar alianzas con el gigante petrolero estatal Pemex si la empresa es la operadora de los proyectos conjuntos. No estaba claro si los inversores en litio reaccionarían de forma similar.
Atrapado entre la arcilla
La creciente demanda del mineral ha impulsado una lucha mundial por asegurar el suministro y el desarrollo de las riquezas de litio de México podría ayudar a diversificar las fuentes globales actualmente concentradas en unos pocos países, liderados por Australia y Chile.
Los productores de litio han estado buscando aumentar agresivamente la producción. Albemarle, por ejemplo, espera duplicar la capacidad este año, y su rival SQM prevé elevar los volúmenes de carbonato de litio en más de 70% en 2021.