“La línea de crédito flexible es un instrumento de carácter precautorio que refuerza la reserva de activos internacionales y complementa así las herramientas de las autoridades mexicanas para enfrentar condiciones externas adversas y preservar la estabilidad económica y financiera”, detallaron las dependencias.
Por su parte el FMI destacó que el gobierno mexicano ha mantenido con éxito la estabilidad macroeconómica, fiscal y financiera pese al complejo entorno económico.
La línea de crédito flexible anterior con el FMI tenía un valor de alrededor de 61,000 millones de dólares y México ha expresado su deseo de solicitar una nueva reducción del acceso en la revisión de mitad de periodo el próximo año.
En agosto pasado, México recibió 12,117 millones de dólares (mdd) vía Derechos Especiales de Giro (DEG) de parte del Fondo.
Banxico informó que esta transferencia se hizo con el fin de proveer de liquidez adicional al sistema económico mundial mediante el fortalecimiento de las reservas internacionales de los países miembros.