Los precios suben sin cesar desde hace un año.
La inflación ascendió a 6.6% en 12 meses a marzo en Estados Unidos y los precios subieron 0.9% entre febrero y el mes pasado, según el índice PCE, el que sigue la Fed.
El otro indicador de inflación, el CPI, referencia para el cálculo de jubilaciones, mostró un incremento de precios de 8.5% en 12 meses a marzo, el mayor desde diciembre de 1981.
Las dos medidas se calculan a partir de grupos de bienes y servicios diferentes, lo cual explica la disparidad de porcentajes.
En marzo la Fed subió sus tasas por primera vez desde 2018. Pero su primer movimiento fue prudente, con un alza de 0.25 puntos de base, para llevar los tipos de interés a un rango de 0.25-0.50%.
En ese momento manifestó su predisposición a otras seis subidas de tasas este año, una por cada reunión de política monetaria.
Además de subir las tasas de interés, la Fed debería dar indicios del comienzo de la reducción de sus tenencias de bonos, otra etapa importante de la normalización monetaria.
Las tasas se mantuvieron ultrabajas durante la pandemia para apoyar a la economía, y ahora suben para tratar de contener la inflación.
Estabilidad de precios es "esencial"
Con una presión sobre los precios que no cede, el presidente de la Fed, Jerome Powell, sostuvo que es "absolutamente esencial" restablecer la estabilidad de precios y subir "rápidamente" las tasas.
La Fed tiene dos cometidos principales: asegurar la estabilidad de precios y el pleno empleo.