También se deben flexibilizar las condiciones para brindar una mejor y pronta atención, ya que pueden suscitarse más casos como el del joven jalisciense. Además el 20% de la población mexicana padece algún tipo de discapacidad, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
De acuerdo con la funcionaria, la aplicación de la normatividad fiscal es compleja, y la mayoría de los problemas que dan a conocer los contribuyentes no son causados de manera intencional, sino que se da por el rígido sistema tributario que prevalece.
“Hay manuales de operación de atención del SAT para todas las personas y hay un anexo para casos especiales, son personas de la tercera edad, discapacidad, embarazadas, hay un protocolo diferente para cubrir necesidades de la sociedad diversa”, dijo.
No obstante, existen condiciones que deben ser modificadas con el objetivo de mejorar la atención. Por ejemplo, la ficha 105 del Código Fiscal de la Federación (CFF) en la que falta especificar si las personas con discapacidad, y de acuerdo a qué tipo de discapacidad, pueden o no designar a un representante legal para realizar trámites, contraer obligaciones o sustituir su voluntad, explicó la delegada.
Daniel Robles Haro dijo esta semana que el SAT le entregó su firma electrónica.
“La verdad, lo que pasó en el SAT me afectó mucho en lo personal. Llegué a mi casa. Escribí el hilo para desahogarme y compartirlo con alguien y después me acosté a dormir tratando de olvidarme del asunto”.
“Lo que no esperaba es que tuviera la respuesta que tuvo. Y ahora estoy feliz, creo que esto ayuda a hacer más visibles a personas con parálisis cerebral severa como la mía”, detalló en una columna que publicó en la página de internet de la Fundación “Yo También” .