“No vamos a poner en negociación el dominio de la nación, del pueblo de México, sobre el petróleo. Eso está clarísimo, el petróleo es de los mexicanos. Cuando se iba a renegociar el Tratado pusimos como condición que no entrara el petróleo, se quitó el capítulo del petróleo”, agregó.
El miércoles Estados Unidos y Canadá hicieron la petición formal de consultas por la política energética mexicana, la cual da prioridad a Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) sobre empresas privadas.
El presidente de México también dio a conocer que, a través del canciller Marcelo Ebrard, se ha pedido a Jesús Seade, quien fue parte del equipo negociador de México, que ayude para responder a la consulta solicitada por EU y Canadá.
“Hemos hecho muchos esfuerzos para atender a empresas estadounidenses, nos hemos puesto de acuerdo con casi todas. Atendí a 19 empresas, y de las 19 se lograron acuerdos con 17”, destacó el mandatario al tiempo de señalar que empresarios estadounidenses se comprometieron a invertir 40,000 millones de dólares en el sector energético. “Ya firmamos acuerdos”.
Tintes políticos
El mandatario mexicano ve un tono político en las consultas por la política energética, ya que no son las empresas las que están inconformes.
“Tengo indicios de que esto tiene que ver con los intereses creados, que se sienten afectados porque se dedicaban a saquear a México”, apuntó López Obrador al recordar que durante su visita a Washington no se tocó el tema energético, tampoco durante su reunión con empresarios.
“Tenemos muchísimos elementos para responder, y, si se trata de una sanción de tipo político, también nos vamos a defender”, agregó el mandatario al tiempo de señalar que “si no hay razón, no vamos a quedarnos con los brazos cruzados”.