"No creo que la Fed vaya a dejar de subir las tasas. Si miras las cifras de inflación, son realmente altas, pero bajarán", dijo recientemente a Reuters Gregory Faranello, analista jefe de AmeriVet Securities en Nueva York.
"El ritmo de aumento del empleo no muestra signos de desaceleración y la tasa de desempleo sigue siendo baja. UBS espera que el FOMC eleve la tasa de interés de los fondos federales en 75 puntos base para su reunión de julio", detalla su documento.
El banco de inversión señala que con estos datos de inflación no se descarta que incluso en la reunión de septiembre haya otro incremento de 75 puntos base.
Aunque algunos analistas han sostenido que una inflación del 9% llevaría a la Fed a subir la tasa en 100 puntos base, UBS considera ese movimiento como riesgoso. Sin embargo, si eso ocurre, la tasa subirá 75 puntos en septiembre.
UBS espera que los miembros de la Reserva Federal reconozcan que la actividad económica se moderó en el primer semestre aunque seguirán destacando la fortaleza del mercado laboral. Pese a que un aumento en las tasas provoque un menor crecimiento, la Fed seguirá comprometida con regresar la inflación a su objetivo de 2%.
La institución también espera que un descenso de la inflación subyacente y las preocupaciones por el crecimiento económico pongan un alto al incremento de tasas después de diciembre y se regrese a un ciclo de bajas en las tasas en 2023.
Respecto al crecimiento económico y los riesgos de una recesión. Grupo Financiero Banorte también espera que este año la economía estadounidense sufra dos trimestres de contracción.
"Hay un riesgo de que Estados Unidos pueda entrar a una recesión, pero va a ser un par de trimestres, quizás, con tasas negativas. Estimamos que crecerá de manera moderada en todo el año 1.3%", dijo Alejandro Padilla, economista en jefe de Grupo Financiero Banorte.