"Estos saldos negativos en el IEPS no tienen ninguna afectación en las finanzas públicas porque se están generando más ingresos petroleros, además de una mayor recaudación por parte del ISR de las empresas, el impacto no es negativo, si no es neutral, en los ingresos totales estamos por arriba de los 166,000 millones de pesos, por lo que no hay falta de ingresos petroleros, no se está perdiendo flujo", dijo Gabriel Yorio, subsecretario de Hacienda en conferencia de prensa.
El funcionario de Hacienda explicó que sin el subsidio, el costo de las gasolinas sería 35% mayor, tendríamos una inflación de 11%, y alzas en las tasas de interés de referencia del Banco de México (Banxico) más altas a las que se han visto recientemente.
De acuerdo con el subgobernador del Banxico, Jonathan Heath, los subsidios a las gasolinas y diésel es la medida del Paquete contra la Inflación y la Carestía (Pacic) que más contribuye a amortizar la inflación, de no tener esos apoyos, la inflación en México sería de 11% y no de 8%, como reportó para el mes de junio el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Estimaciones de Banco Base refieren que el 30% de las mercancías en el mercado se mueven por autotransporte que utiliza diésel, por lo que es de gran importancia este apoyo. Su importancia es tal en este momento, que en caso de retirarlo subirían de manera importante los precios y tendría un costo político para el actual gobierno, de acuerdo con Alfredo Sandoval, analista de Banco Base.