Los precios al productor caen en EU por menor costo de gasolinas

Economistas encuestados por Reuters habían previsto que el IPP se mantuviera sin cambios en el mes y subiera 3.0% interanual.

El gobierno de EU informó el miércoles de que los precios al consumidor a nivel general apenas subieron en marzo. Y aunque la inflación subyacente se mantuvo fuerte, los alquileres subieron a su ritmo más lento en casi un año.

Próxima alza en tasa de interés

Los mercados financieros apuestan a que la Reserva Federal subirá las tasas de interés en otros 25 puntos básicos en su reunión de política monetaria del 2 y 3 de mayo, según la herramienta FedWatch de CME Group. Esa será probablemente la última alza en la campaña de endurecimiento monetario más rápida de la Fed desde finales de la década de 1980.

El mes pasado, la Fed subió su tasa de interés de referencia a un día en un cuarto de punto porcentual, pero indicó que estaba a punto de detener las alzas en un guiño a la agitación de los mercados financieros. Desde marzo del año pasado, la tasa de interés oficial ha subido 475 puntos básicos, desde un nivel cercano a cero hasta el actual 4.75%-5.00%.

Dos tercios de la caída del IPP del mes pasado se debieron a un descenso de 1.0% en los precios de los bienes. Los precios de los bienes cayeron 0.3% en febrero. Los valores de la gasolina disminuyeron 11.7% el mes pasado.

También bajaron los precios del diésel, el gas natural para uso residencial y la energía eléctrica. Los valores de la gasolina van a repuntar después de que Arabia Saudita y otros productores de petróleo de la OPEP+ anunciaran este mes nuevos recortes de la producción de crudo.

Los precios de los alimentos repuntaron 0.6%. Excluyendo los volátiles componentes de los alimentos y la energía, los precios de los bienes subyacentes avanzaron 0.3%, tras una alza similar en febrero. Los precios de los servicios cedieron 0.3%, el mayor descenso desde abril de 2020. Se produjo una caída de 0.9% en los márgenes de los servicios comerciales de demanda final. El costo de los servicios de transporte y almacenamiento cayó 1.3%.

Excluyendo los componentes de alimentación, energía y servicios comerciales, los precios al productor subieron 0.1% en marzo. El IPP subyacente aumentó 0.2% en febrero. En los 12 meses a marzo, el IPP subyacente ganó 3.6% tras incrementarse 4.5% en febrero.

Aumentan los pedidos semanales de subsidio por desempleo

En tanto, el número de estadounidenses que presentaron nuevas solicitudes de subsidio de desempleo aumentó más de lo previsto la semana pasada, otra señal de que las condiciones del mercado laboral se están relajando a medida que el encarecimiento de los préstamos frena la demanda en la economía.

Las solicitudes iniciales de subsidios estatales de desempleo aumentaron en 11,000, a una cifra desestacionalizada de 239,000, en la semana finalizada el 8 de abril. Economistas consultados por Reuters habían previsto 232,000 solicitudes para la última semana.

Las revisiones anuales de los datos publicados por el gobierno la semana pasada mostraron unas solicitudes mucho mayores en lo que va de año de lo que se había estimado anteriormente, en consonancia con una avalancha de despidos de alto nivel en las industrias tecnológicas, así como en otros sectores muy sensibles a las tasas de interés.

Sin embargo, los pedidos siguen por debajo del nivel de 270,000, cuya superación, según los economistas, indicaría un deterioro del mercado laboral. El informe del pasado viernes mostró un sólido ritmo de crecimiento del empleo en marzo y la tasa de desempleo volvió a caer hasta 3.5%, mientras que los aumentos salariales siguieron siendo moderados.

Aunque las ofertas de empleo cayeron por debajo de los 10 millones a fines de febrero por primera vez en casi dos años, ese mes hubo 1.7 vacantes por cada desempleado, lo que podría facilitar el acceso a un puesto de trabajo a algunos trabajadores despedidos.

Aún no hay indicios de que el endurecimiento de las condiciones crediticias tras la quiebra de dos bancos regionales el mes pasado haya provocado pérdidas de empleo. Los economistas prevén que pequeñas empresas como restaurantes, bares y salones de manicura se vean afectadas por la restricción del crédito.