Las personas subocupadas, es decir, aquellas que dijeron tener necesidad y disponibilidad para trabajar más horas, fueron cuatro millones -6.8% de la población ocupada-, una reducción de 742,000 personas, explicó el Inegi en un comunicado.
La tasa de informalidad fue de 55% (32.5 millones de personas) en marzo, 0.8 puntos porcentuales menos que en el mismo mes de 2022.
Por sector, los servicios emplearon a 25.6 millones de personas en marzo (43.4%), el comercio a 11.5 millones (19.4%), la industria manufacturera a 9.9 millones (16.8%); mientras que en las actividades agropecuarias trabajaron 6.5 millones de empleados (11%), 4.8 millones más (8.1%) en la construcción y 433,000 (0.7%) personas laboraron en la minería, electricidad, agua y suministro de gas, detalló la ENOE.
40.6 millones de personas ocupadas laboraron como trabajadores subordinados y remunerados, 13.1 millones lo hicieron de forma independiente o por su cuenta sin contratar empleados; 3.1 millones fueron patrones, 2.2 millones se ocuparon en el negocio parcela familiar.