“En 2022, de las 13.3 millones de personas de 15 años o más con disponibilidad de ofertar trabajo, se registraron 5.4 millones de personas capacitadas en el área STEM. El 53% de ellas tiene estudios en ingenierías, 30% en tecnologías, 16% en ciencias y el 1% en matemáticas”, escribió la dependencia. “Sin embargo, solo 3.8 millones de ellas se encuentran ocupadas”.
Con la relocalización de las cadenas de producción a nivel global, México destaca por su vecindad con Estados Unidos como uno de los países más atractivos para la llegada de inversiones de alto valor. No obstante, especialistas han afirmado en meses recientes que la fuerza laboral nacional no está lo suficientemente calificada para aprovechar al máximo esta oportunidad.
Hacienda considera lo contrario.
“La ola de inversión extranjera que ha experimentado México no será frenada por falta de capital humano especializado”, aseveró. “En el mediano plazo, estas inversiones se beneficiarán del abundante talento mexicano y de la reconversión de habilidades de la fuerza laboral mexicana”.
No obstante, existen dos problemas clave: las personas empleadas con habilidades STEM están concentradas en unos cuantos estados y muchas otras realizan actividades que no son afines a sus estudios y experiencia.
Sobre el primer problema, Hacienda detalló que en la región noroeste, por ejemplo, que comprende Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas, se concentra el 10.4% de las personas ocupadas capacitadas en áreas STEM, mientras que Guerrero, Oaxaca y Chiapas solo tiene empleada al 2.8% del total de estos trabajadores.
“En la industria manufacturera mexicana existen 9.5 millones de personas ocupadas; de éstas, solo el 10% cuentan con capacitación en el área STEM”, apuntó la SHCP. “No obstante, estas 955,000 personas equivalen al 54% del empleo total en el sector manufacturero canadiense, 35% del malasio y el 30% del taiwanés”.
Sobre la subutilización, la dependencia señaló que, por ejemplo, de las 494,000 personas con formación STEM empleadas en el comercio al por menor, 100,000 tienen estudios en desarrollo de software y páginas web, sin embargo, 56% de ellas se desempeñan como vendedores o despachadores y solo 11% realiza actividades ligadas con sus estudios.
“En el mismo sentido, existen 28,000 personas que cuentan con formación en desarrollo de software en el sector de alojamiento y preparación en alimentos; no obstante, las ocupaciones que desempeñan en el sector no son afines a su formación”, añadió.
Hay industrias con un mejor desempeño, según Hacienda, como la química, en donde 77% de los ingenieros de formación sí desempeñan labores relacionadas con sus estudios. Además, 55% de las ingenieras de ese sector son mujeres.
