Sin embargo, dijo que la calificación está limitada por indicadores de gobernanza débiles, un historial de crecimiento moderado a largo plazo y riesgos fiscales relacionados con pasivos contingentes de Pemex y rigideces presupuestarias crecientes.
Advirtió que el paquete de reformas del presidente Andrés Manuel López Obrador, que incluye el la del Poder Judicial, en general afectarían negativamente el perfil institucional de México, "pero es demasiado pronto para evaluar la posible gravedad antes de su aprobación e implementación".
La gobernanza de México ya es relativamente débil, con una puntuación del Indicador de Gobernanza Mundial del Banco Mundial en el percentil 32, que está muy por debajo de la mediana "BBB" del percentil 58.
La calificadora proyecta un déficit del gobierno general de 5.4% del PIB en 2024 y de 4% en 2025, frente al 3.6% en 2023 y un promedio de 2% durante el período 2015-2019.
El presupuesto de 2024 incluía un déficit fiscal del sector público no financiero superior al 5% del PIB, el nivel más alto en más de tres décadas.
"La administración entrante heredará un déficit significativo causado por el aumento del gasto social y los mayores costos de endeudamiento", indicó Fitch.
Resaltó que si bien el gobierno entrante aspira a reducir el déficit a niveles compatibles con una trayectoria estable de deuda/PIB, sigue habiendo incertidumbre sobre cómo y con qué rapidez se logrará, lo que tal vez solo se aclare una vez que se proponga el presupuesto de 2025.
"Anticipamos que la deuda gubernamental aumentará al 49% del PIB en 2024 desde el 46% en 2023, aunque se mantendrá muy por debajo de la mediana de 55% de la categoría "BBB". Nuestras proyecciones indican un aumento gradual a mediano plazo hasta el 52.8% en 2026".
Respecto a Pemex, la calificadora dijo que no espera ningún cambio en la disposición del gobierno para apoyar financieramente a la petrolera durante la administración de Sheinbaum.
La administración entrante ha expresado su intención de mantener la posición dominante de Pemex en el mercado petrolero mexicano, tanto en el upstream como en el downstream.
"Esto probablemente requerirá transferencias federales continuas a menos que haya una mejora significativa en la eficiencia operativa de la empresa o una reducción en su carga de deuda. El apoyo fue sustancial durante la administración de AMLO (aproximadamente el 4% del PIB entre 2019 y 2023", comentó.
Finalmente, en lo que corresponde al crecimiento del PIB real se desacelerará a 2% en 2024 desde 3.2% en 2023, antes de caer aún más a 1.8% en 2025.
"Anticipamos que la actividad económica se recuperará durante el resto de este año después de una economía más débil durante el primer trimestre", refirió Fitch.
Por su parte, la Secretaría de Hacienda apuntó que con este anuncio, siete agencias han ratificado la calificación crediticia de México en el año, manteniendo una perspectiva estable para el país.
"Esta ratificación de la deuda soberana permitirá continuar con un acceso favorable a los mercados nacionales e internacionales", destacó.