Los mercados asiáticos sufrieron un colapso este lunes ante una postura restrictiva del banco central de Japón y la sensación de incertidumbre económica en Estados Unidos.
El viernes pasado se dio a conocer que en Estados Unidos tuvo una tasa de desempleo de 4.3%, una cifra mayor a la esperada por los analistas. El dato, aunque malo, no basta para decir que Estados Unidos está en recesión.
"Sí hay datos que muestran esta desaceleración y uno de los primeros es el empleo pero no es catastrófico. La creación de empleo es positiva, alrededor de 110,000 el mes pasado, pero sigue siendo una creación positiva", dijo en entrevista Luis Gonzali, vicepresidente y director de inversiones en Franklin Templeton. "Todavía no pensaría que estamos en recesión o que el día es inminente, pero sí hay una tendencia al deterioro".
CI Banco coincidió en esta postura y destacó que "el mercado está exagerando y sobre reaccionando al riesgo de una debilidad económica significativa o de una posible recesión económica en Estados Unidos".
Para los analistas, es necesario contar con más información para poder concluir que la principal economía enfrenta un episodio de fuerte ralentización.
"La realidad es que parece todavía estar lejos de un escenario recesivo", añadió CI Banco.
La semana pasada, la Reserva Federal abrió la puerta a un primer recorte a la tasa de interés debido a que la inflación se ha desacelerado.
El presidente de la Fed, Jerome Powell, dijo que seguirán observando de cerca los datos, y si todo sigue moviéndose en la dirección actual, entonces un recorte de tasas podría estar sobre la mesa en la reunión de septiembre.
Las opiniones de Powell no significan que el banco central esté observando una franca desaceleración de la economía.
Lo que busca la Fed es tener un soft landing (aterrizaje suave) porque si el banco central estadounidense viera señales importantes de desaceleración, la reducción de tasas ya hubiera ocurrido, considera Gonzali.
Además, los malos resultados trimestrales de empresas como Tesla, Alphabet y Amazon alimentaron la preocupación por la salud de la economía estadounidense.
"El sentimiento negativo de los operadores se ha visto además afectado por los resultados trimestrales de Microsoft, Amazon e Intel, que han sido mal recibidos. Las acciones de Amazon registraron caídas debido a una guía prospectiva más débil, mientras que Intel se desplomó después de unas malas previsiones, la cancelación del dividendo y el despido de miles de empleados como parte de una campaña general de reducción de costos. Por su parte, Microsoft decepcionó en el tema de la nube", destacó CI Banco.
Pero Gonzali ve que el comportamiento negativo de las empresas de tecnología responde a las altas expectativas que tenían estas empresas en la inteligencia artificial.
"Yo no lo extrapolaría directamente al tema económico, o a la economía en general. Es un sector muy pequeño, es un sector que está impulsado por una sola narrativa, que es la narrativa de la inteligencia artificial", dijo Gonzali.
