En meses anteriores, empresas como Nu y Finsus, dos de las tres Sofipos más grandes en el país por activos, anunciaron sus intenciones de convertirse en banco aunque otras firmas también han anunciado que se quieren unir al grupo de las Sofipos como Ditobanx, una firma que inició operaciones ese mes.
"Este es un mercado en expansión y en maduración, y eso implica diferentes cosas: hay jugadores tocando la puerta, hay una cantidad mayor de empresas queriendo entrar de las que han mostrado algún tipo de interés de salir. Los incentivos a voltear a ver otras figuras como la bancaria tiene que ver con algunos temas regulatorios que estamos gestionando para que haya cambios y que fortalezcan aún más el marco normativo", destacó Fernández.
El también director general de Crediclub destacó que las autoridades tienen una propuesta desde 2022 en las que pidieron mejoras en materia de criterios contables, la posibilidad de ofrecer productos de nómina y emitir tarjetas de crédito.
"Creemos que el ampliar esa facultad a las Sofipos va a ayudar a mejorar la calidad de los productos que tienen millones de trabajadores mexicanos que merecen tener más opciones", añadió.
Pero otro de los temas relevantes para el sector es el de la digitalización, una herramienta clave en el éxito que han tenido estas instituciones. Fernández dijo que la agenda del dinero digital es una de las prioridades de la AMS.
“Hay muchos actores que tenemos que unirnos para que el dinero se haga cada vez más digital, para que se baje el uso de efectivo y eso permita que las personas realmente puedan hacer un uso amplio de servicios financieros que mejoren su calidad de vida”, dijo.
La digitalización de las transacciones permite a los usuarios dejar una huella digital que las Sofipos pueden usar para conocer al cliente y así ofrecer productos acordes a sus hábitos. Fernández dijo que esto ya lo hacen países como India, Brasil o China, en donde la digitalización permite la hiperpersonalización.