"Bueno, debería bajarlas. Y en algún momento lo hará. Preferiría no hacerlo porque no es fan mío. Simplemente no le caigo bien porque lo considero un estirado", dijo en la entrevista, grabada en Florida el viernes.
Al preguntársele si destituiría a Powell antes de que finalice su mandato en 2026, Trump emitió su negación más categórica: "No, no, no. De ninguna manera. ¿Por qué haría eso? Puedo reemplazar a esa persona en breve".
Las acciones de Wall Street se hundieron en abril después de que Trump redobló sus ataques contra Powell, lo que amplió las preocupaciones sobre la autonomía del banco central y sacudió los mercados. Tras ese episodio, el mandatario ha dado marcha atrás.
Los comentarios emitidos el domingo fueron la indicación más clara hasta el momento de que Trump mantendría a Powell en su cargo, lo que podría tranquilizar a los mercados tras las medidas del republicano que han trastocado el comercio global con un tsunami de aranceles.
Trump impuso el 2 de abril un arancel del 10% a la mayoría de los países, junto con gravámenes más altos para muchos socios comerciales, que posteriormente se suspendieron durante 90 días. También impuso aranceles del 25% a los automóviles, el acero y el aluminio, del 25% a Canadá y México, y del 145% a China.
El gobierno de Trump negocia con más de 15 países pactos comerciales que podrían evitar los aranceles más altos, y los funcionarios dicen que el primer acuerdo podría anunciarse pronto.
Durante la entrevista con NBC News, Trump se negó a descartar la posibilidad de que algunos de los aranceles se hicieran permanentes.
"No, no lo haría porque si alguien pensara 'se van a retirar de la mesa de negociaciones', ¿por qué construirían en Estados Unidos?", dijo.
Trump reconoció que había sido "muy duro con China", pero dijo que Beijing ahora quiere llegar a un acuerdo.
"Lo quieren con todas sus fuerzas. Ya veremos cómo resulta todo, pero tiene que ser un acuerdo justo", destacó.