México recauda en impuestos 17.7% de su PIB, es el octavo país con menor captación entre los países de Latinoamérica, con 21.3%, y está por debajo del promedio de la OCDE, con 33.9%, de acuerdo con cifras de la Cepal.
En términos de PIB, Brasil casi duplica el porcentaje que recauda México, con 32%.
Distintos motivos están detrás de estos bajos índices de recaudación. “Uno de ellos es la gran informalidad de nuestra economía, pero también hay un problema recurrente de la evasión y la elusión de impuestos”, agregó el integrante del IMEF.
La economía informal reproduce un fenómeno que influye en diversos sectores económicos del país, lo cual representa un problema exponencial, debido a que el dinero recaudado puede ser de procedencia ilícita e introducido al sector formal mexicano, a través de una persona física o moral, para la comisión de los delitos de lavado de dinero o financiamiento al terrorismo, refiere la Evaluación Nacional de Riesgos de Lavado de Dinero y Financiamiento al Terrorismo 2023 de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF).
Además, la informalidad es un “factor para la comisión de delitos como evasión fiscal o contrabando, entre otros, lo que representa un riesgo importante de lavado de dinero en México”, advierte la UIF.
En la informalidad, las empresas no están en el Registro Federal de Contribuyentes (RFC) del Servicio de Administración Tributaria (SAT), no pagan impuestos como el ISR, no brindan seguridad social a sus trabajadores, utilizan dinero en efectivo, el cual es más difícil de rastrear.
La economía informal en México registró una participación de 24.8% en el PIB en 2023, es el nivel más alto del que se tiene registro, al menos de los últimos 20 años.
Más de 50% de los empleos en México se dan en la informalidad.