Inadem busca transparentar los apoyos a los emprendedores

El Fondo Nacional Emprendedor (FNE) llega a su último año en la actual administración con nuevos cambios en sus reglas de operación: las convocatorias pasan de las 14 que tuvo en el ejercicio anterior, a 13; reduce el monto de los subsidios e impone más requisitos para evitar duplicidades en los apoyos y mejorar la transparencia.

El FNE, instrumento del gobierno federal para apoyar a micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) y emprendedores, ocupó en 2017 el segundo lugar en el índice de desempeño de programas gubernamentales, de acuerdo con una evaluación del think tank de políticas públicas Gestión Social y Cooperación (Gesoc). El año pasado, el portal del Sistema Emprendedor, plataforma operativa del Fondo, migró a una nueva versión digital, más intuitiva y amigable.

Especialistas en emprendimiento consultados consideran que esos esfuerzos y los nuevos requisitos afianzarán el control y la transparencia del FNE.

“La digitalización del procedimiento ha contribuido a eliminar o sortear a los intermediarios, lo que permite además que los criterios para seleccionar a los beneficiarios puedan ser más objetivos”, considera Alfredo Elizondo, coordinador de Proyectos de Gesoc.

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Marco Butrón, cofundador Proyectil califica este cambio como "dramático". “Es increíble que no se tengan que presentar papeles en ningún lado o hacer trámites a través de personas, sino mediante el sistema digital. Ha sido un cambio dramático”, asegura. Proyectil es uno de los 21 talleres de alta especialización reconocido por el Inadem (Instituto Nacional Emprendedor) para el desarrollo de prototipos.

Héctor Alcázar, director comercial de Grupo Alcázar y Netba, su aceleradora de negocios avalada por el Inadem, sostiene que la transparencia del Fondo ha mejorado año con año, y apunta a que los requisitos para cumplirla deben ser sencillos y prácticos.

Grupo Alcázar es una consultora especializada en franquicias. Entre 2014 y 2015 este tipo de negocios contó con convocatorias específicas. En los siguientes años, el apoyo disminuyó gradualmente hasta desaparecer en este 2018.

Estos son los 10 cambios más relevantes en las reglas del FNE 2018:

1) Trece convocatorias. Este año reaparece la convocatoria 2.5 Organización y realización de eventos empresariales y de emprendimiento, que fue eliminada en el ejercicio 2017, y se suprimen aquellas para la creación de fondos de inversión (las 3.1 y 3.2, en las reglas de 2017).

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2) Redistribuyen montos. En este ejercicio se destina 70% de los recursos a las convocatorias, cinco puntos porcentuales menos que el año pasado, que se trasladan a la asignación directa que hace el Fondo a proyectos productivos que considere pertinentes, que queda en 30 por ciento. También aumenta levemente, 0.25%, los recursos para la operación, supervisión y evaluación de iniciativas.

3) Eliminan puntos adicionales. En años anteriores, el Fondo otorgaba hasta 15 puntos extras a proyectos de mipymes de agendas sectoriales y a mujeres emprendedoras, lo que aumentaba su posibilidad de acceder a los subsidios. Esta distinción desaparece este año, en cambio se mantiene la división por regiones.

“La regionalización da ventajas a proyectos de zonas donde no se genera tanta innovación. Las iniciativas más competitivas continúan dándose en la zona centro, donde las hay con más de 100 puntos –por los adicionales- de la Ciudad de México, Nuevo León y Jalisco, lo que no sucede en el Sur-Sureste. Ahora, al desaparecer los puntos extras se dará más competitividad a proyectos innovadores”, confía Alcázar Córdova.

4) Más evaluaciones. Este año habrá cinco tipos de evaluaciones, dos más que en ejercicios anteriores. A la normativa, de viabilidad técnica, financiera y de negocios, del consejo estatal, se suman la de agendas sectoriales y la computarizada. Aplicará de la siguiente forma:

Los especialistas consultados coinciden en que la ampliación de evaluaciones no afectará a los proyectos que busquen el subsidio, porque no aplica para todas las convocatorias. Incluso elimina la calificación del Consejo Estatal para Incubadoras de Alto Impacto, Aceleradoras y Talleres Especializados.

“Durante el proceso –de 2017- no nos pidieron subir ningún otro tipo de documento para la evaluación estatal. Si en algo afecta es que será más rápido”, considera Butrón.

5) Desaparecen microfranquicias. El programa de Microfranquicias, lanzando por el Inadem en 2015 y aún vigente en el ejercicio anterior, que mostraba un abanico de negocios con inversiones hasta de 10,000 pesos, desaparece en las nuevas reglas de operación del Fondo.

6) Obligaciones para todos. Además de las instituciones públicas y privadas, en 2018 las dependencias federales, estatales y municipales, así como mipymes y emprendedores beneficiarios del FNE deberán acreditar que están al corriente con sus obligaciones fiscales ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT).

7) Blindaje contra trampas. Para demostrar la estratificación de cada empresa, estas deberán presentarán este año el alta de sus trabajadores ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), así como la declaración anual de Impuesto Sobre la Renta.

Estas medidas, expone el coordinador de Gesoc, darán certeza de que se apoya a empresas formales. “Son un incentivo hacia la formalidad, aunque son limitados los recursos con los que cuenta el FNE para que pueda tener un impacto amplio con respecto al universo de las mipymes”.

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8) Evitar duplicidad de apoyos. El FNE exige en las nuevas reglas que los organismos intermediarios, las Sedeco (Secretaría de Desarrollo Económico) y ayuntamientos con declaratorias de emergencias por desastres naturales manifiesten por escrito que evitarán la duplicidad de apoyos con otros programas de gobierno. También deberán comprobar que el apoyo fue entregado en un plazo no mayor de seis meses.

9) Transparencia. Para fortalecer este rubro, el Inadem solicitará a la Secretaría de la Función Pública (SFP) la confronta anual del padrón del FNE con otros programas del gobierno federal. En caso de que algún beneficiario del fondo haya recibido ayuda de otras dependencias, se solicitará el reembolso de apoyo otorgado.

10) Comité de Riesgos y Análisis de Proyectos. El Inadem crea este año un mecanismo encargado de verificar el cumplimiento de la aplicación de los apoyos, modificaciones y prórrogas a los proyectos, así como el cierre de los mismos cuando han concluido. Será presidido por un director general del organismo y lo conformarán representantes de otras áreas del Instituto.

A pesar de estos requisitos, Gesoc ve poco impacto para evitar la duplicidad de recursos: “Aún no contamos con un padrón único de beneficiarios de programas federales. En el caso de las entidades federativas es peor, sólo el 30% de 1,230 programas sociales tienen padrón. Es casi imposible rastrear esta información” expone Elizondo.