Moons, la start-up mexicana que usa impresión 3D para alinear los dientes
Tommaso Tomba se quedó con la boca abierta cuando el dentista le dijo que le cobraría 7,000 dólares por colocarle los alineadores invisibles que necesitaba. Era 2017, trabajaba y estudiaba en Londres, y había acudido al consultorio a cotizar el servicio. “Mis dientes no estaban tan mal, no entendía por qué el precio era tan alto”, cuenta el cofundador de Moons, start-up de alineadores invisibles fabricados con impresión 3D y cuyo costo es 65% más bajo que los disponibles en el mercado.
El emprendedor investigó la demanda de alineadores dentales utilizados en ortodoncia, un producto hecho con acetato transparente, removible y que se sustituye cada dos semanas. “Lo novedoso de este sistema es la tecnología digital, que va desde el uso de escáner para impresión de toda la boca hasta la planeación virtual en 3D de los movimientos de los dientes, los cuales pueden ser observados por el paciente antes de iniciar el tratamiento”, explica Agustín Zerón, miembro de la Asociación Dental Mexicana (ADM).
El 99% de los pacientes que se colocan brackets o alineadores lo hacen por estética dental, calcula Diana Bernal, odontóloga con cerca de 20 años de experiencia. En 2018, el mercado global de brackets se valuó en 1,300 millones de dólares. En él participan fabricantes como 3M y Align Technology, que empujan un crecimiento de 8% anual hacia el 2023, de acuerdo con la agencia de investigación Technavio. Esto ha provocado que surjan start-ups como Moons, que buscan reducir el costo de alineadores y las visitas al ortodoncista.
Lee: Los pacientes de EU y Canadá prefieren a dentistas mexicanos
Luego de identificar que la demanda de los alineadores era alta en México, Tomba creó Moons en diciembre de 2018 y decidió explotar el mercado nacional que ya conocía por su trabajo en el e-commerce Linio. “Descubrí que mucha gente compra directamente sin tener una marca confiable”, comenta el cofundador.
Tomba renunció a su trabajo en el fondo de inversión Deep Science Ventures, regresó a México y se asoció con Leonardo Mirón, cofundador de la compañía de chatbots Gus Chat. Los socios reunieron 1.5 millones de dólares para iniciar operaciones en enero pasado. La start-up fabrica los alineadores personalizados en la Ciudad de México, desde donde los envía, en paquetes de 20 a 24 unidades, a los domicilios de sus clientes. Hasta ahora han establecido alianzas con dos centros radiólogos para escanear los dientes.
El servicio es para pacientes con alineamiento anormal ligero o mediano. Su costo es cercano a 24,000 pesos, más del doble del costo de los brackets tradicionales pero inferior al que ofrecen clínicas dentales. “Somos la única compañía que vende al paciente y manufactura el producto con impresoras 3D, por eso podemos dar precios mucho más bajos”, indica el CEO de Moons.
Recomendamos: El mercado de cepillos dentales en México puede estar sucio
Una vez que los dientes se escanean, el equipo de ortodoncistas de Moons utiliza un software para hacer el plan de tratamiento que, según el directivo, dura en promedio seis meses. Aunque cada caso depende del diagnóstico inicial y puede extenderse. Alejandro Juárez, miembro de la Academia Mexicana de Ortodoncia, detalla que un caso sencillo o intermedio toma unos 10 meses.
“Necesitamos dar un tratamiento muy bueno, porque el marketing por recomendación es la forma más fuerte que tenemos. Después de eso será mucho más fácil encontrar a inversionistas”, considera el emprendedor. Lo que podría suceder en los próximos seis o nueve meses. El plan a largo plazo es que Moons sea la empresa número uno de alineadores invisibles de América Latina. Su plan de expansión para este año es tener presencia en el Estado de México, Nuevo León y Jalisco.
“Queremos estar en Colombia a finales de este año y para el siguiente en Brasil”, señala Tomba, quien no comparte las cifras de cuántos clientes tiene la empresa, pero asegura que crece 100% cada semana. “Es la cifra de abril, pero este mes estamos creciendo igual en clientes e ingresos”.