Cómo afectará un Trump presidente... al sector aéreo
Desde que el miércoles 9 de noviembre se confirmara la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos, el director general de Volaris, Enrique Beltranena, se puso a trabajar para calmar a los inversionistas de la aerolínea.
La desconfianza de estos en el futuro de las empresas mexicanas, sobre todo en las que tienen negocios relacionados con Estados Unidos, hizo caer las acciones de Volaris en la Bolsa Mexicana de Valores, que acumularon una caída de doble dígito en esa semana.
Sin embargo, la calma del directivo se mantuvo, pues no creía que las promesas proteccionistas de Trump, y la amenaza de deportar a millones de migrantes, vayan a afectar directamente a las aerolíneas.
“México tiene un tratado bilateral con Estados Unidos que no tiene ninguna preferencia hacia las aerolíneas mexicanas. (...) Están en el mismo nivel las aerolíneas americanas y mexicanas. (...) Hay todas las condiciones para no tocar la relación bilateral”, dijo entonces Beltranena.
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Esta respuesta se repite entre directivos y analistas de la industria aérea mexicana: hay beneficios suficientes para las aerolíneas estadounidenses como para que Trump no tenga interés en alterar el acuerdo bilateral aéreo.
“No veo riesgo. Finalmente, es un acuerdo que favorece bastante a la industria de Estados Unidos, por la poca penetración que tienen las aerolíneas mexicanas en ese país”, señala Marco Montañez, analista del Banco Ve Por Más.
Las aerolíneas estadounidenses dominan el mercado bilateral, con cerca del 70% de la participación de pasajeros transportados entre ambos países en 2015, de acuerdo con datos de la Dirección General de Aviación Civil (DGAC).
¿Y la industria aeroespacial?
La reacción de la industria aeroespacial mexicana ante el 'efecto Trump' es similar, aunque con mayor inquietud. “Lo que sabemos es que va haber un cambio, pero no sabemos hasta qué punto o cuál va a ser el efecto que va a tener esto. Hay mucha incertidumbre”, dice en entrevista telefónica Luis Lizcano, director general de la Federación Mexicana de la Industria Aeroespacial (Femia).
“Yo veo muy complicado que haya cambios, porque hay mucha inversión (entre México y Estados Unidos)”, agrega Roberto Corral, vicepresidente de Innocentro, empresa que exporta componentes y diseño de equipo para las aeronaves.
La industria aeroespacial exportó alrededor de 6,363 millones de dólares (mdd) en 2015, y las inversiones previstas colocarían a México entre los 10 principales países productores aeroespaciales en 2020, con exportaciones por 12,267 mdd.
“La industria aeroespacial mexicana es clave para la estadounidense”, sentencia Corral.
