Publicidad
Publicidad

5 puntos para entender la filosofía de Lorenzo Servitje al frente de Bimbo

La ética, el trabajo duro y la preocupación social formaron parte de la visión de este empresario.
vie 03 febrero 2017 10:16 AM
Lorenzo Servitje
Lorenzo Servitje Fallecimiento de Lorenzo Servitje (Foto: Duilio Rodriguez)

La lealtad y el trabajo duro fueron piezas clave durante la dirección de Lorenzo Servitje en Grupo Bimbo , fundado el 2 de diciembre de 1945 en la Ciudad de México, y empresa que ahora está presente en 22 países de América, Asia y Europa.

El empresario, quien falleció este viernes a los 98 años , fue uno de los fundadores de la panificadora junto con Jaime Jorba, Jaime Sendrá, Alonso Velasco y José T. Mata. Así mismo, fungió como director de la empresa en 1965 y logró establecer las bases operativas para el negocio.

Estas son las estrategias clave que el fundador llevó a cabo durante su dirección y que, junto con su hijo Daniel Servitje, compartió con la revista Expansión.

1. La empresa como proyecto de vida

Lorenzo Servitje nunca pensó en fundar una empresa para generar dinero, más bien lo pensó como un proyecto de vida.

Publicidad

La clave del éxito fue la visión de los fundadores de marcar una distinción entre establecer una empresa y establecer un negocio, de acuerdo con Daniel Servitje, actual director de Grupo Bimbo.

“Aquí es más bien cómo lo ha verbalizado por muchos años mi papá. Una empresa es una aventura del hombre y en ese sentido es algo que trasciende un poco al tiempo y que es en esencia el ser un proyecto de personas, el legado es más allá de la rentabilidad o de la utilidad de los accionistas, más bien es una aventura con el objetivo de servir o de innovar”, dijo Daniel Servitje.

2. Respeto a los empleados

Una de las enseñanzas que Lorenzo Servitje le dejó a su hijo fue “tratar a las personas como personas y no como instrumentos”.

“Buscamos ser una empresa altamente productiva y plenamente humana, esa síntesis de la filosofía, y poner al centro de la persona como el valor más importante de los siete que tenemos, yo diría que ésa sigue siendo la constante en la empresa y para la gente de México”, dijo Daniel.

Lorenzo Sertvije compartió una historia que tuvo con uno de sus empleados, en la que este respeto que tenía con sus colaboradores era correspondido con la lealtad. “La lealtad y el amor por la camiseta ha sido el secreto de nuestro éxito, el personal es muy cercano de la empresa. (…) Es único, el cariño que tenemos para esa gente, la verdad es que los queremos, a mi me preguntan muchas cosas, por qué hay esa relación con su personal y les digo: es que los queremos”, contó.

3. Responsabilidad social

Lorenzo Servitje tuvo una pasión emprendedora con proyección social y hasta los últimos días de su vida trabajó en proyectos sociales con la fundación de organizaciones no gubernamentales, como la Fundación Mexicana para el Desarrollo Rural, y apoya Más ciudadanía.

“Tenemos la filosofía de la doctrina social y cristiana, de estar cerca de los pobres y de tener una responsabilidad por tener dinero”, aseguró.

Uno de los puntos que incluye el código de ética de Grupo Bimbo es el compromiso con la sociedad en el que se dedican a promover el fortalecimiento de los valores éticos universales y apoyar el crecimiento económico y social de las comunidades en donde se encuentra la empresa.

3. Obsesión por el trabajo

Lorenzo Servitje implementó una ética de trabajo y de trabajo duro. El exfundador de la panificadora comenzó a trabajar desde muy joven en la pastelería familiar “El Molino”, lugar donde se congregó el núcleo del que nació Bimbo.

En su oficina podía verse una placa colgada en su pared que decía “Early to bed. Early to rise, work like hell and... advertise (Temprano a la cama, temprano a trabajar, trabaja como loco y... anúnciate).

4. Arriesgar para invertir

En 1944, cuando la empresa apenas se estaba formando, Lorenzo Servitje y sus socios se endeudaron al 100% para poder abrir la empresa. Sin embargo, lograron reunir el dinero con préstamos propios y bancarios, pero decidieron correr el riesgo.

Lee: El secreto de los Servijte

“Sí, al arrancar. (...) Tomé el riesgo: trabajar, ahorrar y arriesgarse. (...) Tan arriesgarse que debíamos la mitad del negocio”.

Lo mismo sucedió cuando adquirieron los terrenos para la construcción de la primera fábrica de Grupo Bimbo. Los terrenos los obtuvieron por su suegro que les vendió una manzana entera a través de un crédito financiero.

5. Ser emprendedores

Trabajar mucho, ahorrar y arriesgar, fue el consejo que Lorenzo Servitje dejo para los jóvenes emprendedores que quieren o están apenas incursionando en el mundo de los negocios.

“Trabajar mucho, no ocho horas, ni diez, así, mucho. (…) ahorrar, no gastar, la gente hace negocios y luego luego comienza a gastarse lo que gana, en lugar de invertir y luego que se arriesguen, que no sean conservadores, que tomen ciertos riesgos, calculados”, dijo Lorenzo Servitje.

Newsletter

Únete a nuestra comunidad. Te mandaremos una selección de nuestras historias.

Publicidad

Publicidad