Los reguladores energéticos, contra la ola de desregulación de Trump
Luego de dos meses de que Donald Trump llegó a la Casa Blanca, el Gobierno mexicano comienza a plantearse cómo responder a las políticas que quiere impulsar el mandatario del país vecino a la desregulación energética que planteó en campaña.
México debe imponerse el reto de mantener los estándares regulatorios ante las promesas de una menor vigilancia para las actividades de exploración y extracción de hidrocarburos y carbón en Estados Unidos, coinciden en la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) y en la Agencia Nacional de Seguridad Industrial y de Protección al Medio Ambiente del Sector Hidrocarburos (ASEA).
“A 23 años del TLCAN (Tratado de Libre Comercio de América del Norte) a México le toca ser el garante de la institucionalidad ambiental de la región, porque nos conviene a todos”, aseguró el director ejecutivo de la ASEA, Carlos de Regules.
El presidente estadounidense ha prometido una desregulación en el sector energético para impulsar las inversiones en la exploración y producción de los recursos en aguas profundas del Golfo de México y yacimientos de lutitas en los Estados Unidos.
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La ASEA sostuvo pláticas con las agencias reguladores en Estados Unidos durante la administración pasada, de la cual tomaron referencias para aplicar las mejores prácticas, aunque aún no han establecido contactos tras el cambio de poder en enero, dijo De Regules.
“Nosotros tenemos conversaciones importantes con nuestros colegas en Canadá, esperamos que pronto con nuestros colegas en Estados Unidos también, para cambiar el discurso para no hablar de desregulación, sino de regulación inteligente, de optimizar la regulación”, comentó el regulador.
El funcionario dijo que relajar la regulación para las actividades en el mercado energético de Estados Unidos no durarán mucho tiempo, debido a que los inversionistas verán con escepticismo la duración a largo plazo de estas nuevas medidas.
“No porque en otros países relajen la regulación de seguridad industrial, protección al medio ambiente, México va a relajarlas también. México debe mantener un nivel estricto de regulación en materia de seguridad industrial y protección a medio ambiente”, apuntó el comisionado presidente de la CNH, Carlos Zepeda.
Las actualizaciones a las regulaciones en materia de exploración en aguas profundas, como contratos, seguridad industrial, medio ambiente y tecnológicas tomaron referencias de la estadounidense, que a su vez se volvió más estricta tras el accidente del 2010 en el pozo de Macondo, en el Golfo de México, ubicado dentro del territorio que pertenece a Estados Unidos, apuntó De Regules.
“Lo revisamos y adaptamos al modelo mexicano, y la regulación que publicamos en diciembre es una regulación consistente con lo que ocurre en el lado americano. Un operador en las costas de Luisiana se va a encontrar con las mismas condiciones en las costas de Campeche”, añadió el titular de la ASEA.
La regulación en materia de transparencia tampoco deberá relajarse en Estados Unidos, a pesar de los cambios que pudiera sufrir por la falta de aplicación de la Ley Dodd-Frank (firmada por en tiempos de la administración de Barack Obama), que obliga a las empresas petroleras a reportar las regalías pagadas a gobiernos extranjeros.
“Los principios de reportar las regalías por contrato, los planes de exploración, de producción, todo lo que hacemos en CNH, el Fondo Petróleo Mexicano, Hacienda, todo debe transparentarse por ley. Son premisas intocables, y máximas”, afirmó Zepeda.
México culminó su primera ronda de licitaciones petroleras en la historia con la adjudicación de 10 contratos en aguas profundas en diciembre pasado, y prepara la licitación de más campos en la Ronda 2 , a realizarse a lo largo de este año.
