Joyería de Taxco para el mundo
Taxco es una pequeña ciudad del sureño estado de Guerrero, a menos de 200 kilómetros de la Ciudad de México. Sus habitantes se concentran principalmente en los servicios turísticos la platería y otras joyas en esta última actividad uno de ellos logró hacer famosos un hombre en el mundo: Daniel Espinosa, que hoy da trabajo a más de 100 personas en el taller de joyería que elabora los productos de la marca que lleva su nombre.
El mexicano es uno de los principales representantes de la joyería nacional: ya cuenta con 75 boutiques en México y en una decena de países como España, Francia, Estados Unidos, Puerto Rico, Panamá, República Dominicana, Nicaragua y Rusia.
Detrás de esta presencia internacional hay muchas horas de vuelo y de trabajo en el taller, cuenta Espinosa en entrevista telefónica desde Madrid, donde se encuentra para presentar sus colecciones en varias ciudades de España. Su incursión internacional inició en ese país en 2002, cuando comenzó con la venta de sus piezas en la cadena departamental El Corte Inglés.
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“Si bien ‘cacareamos el huevo’ de los éxitos que, afortunadamente, tenemos en diferentes partes del mundo, no es sencillo. Nos ha tomado algo de tiempo armar equipos en cada uno de los países y hacer una edición especial de las colecciones de acuerdo con los gustos de cada uno de estos países que sólo se van conociendo con el paso del tiempo y con presentaciones constantes”, destaca. Por ejemplo, recuerda que desembarcar en Rusia le tomó muchos años hasta que en 2010 logró dar el paso gracias a unos clientes italianos.
Espinosa ha echado mano de todos los recursos a su alcance para incrementar sus puntos de venta donde presentar sus creaciones. Por ello, ha aprovechado tanto las ferias como los espacios de venta en tiendas de lujo como El Palacio de Hierro, e incluso, las exposiciones internacionales de arte, como la realizada en Londres sobre Frida Kahlo, donde el joyero fue seleccionado para acompañar la exhibición. También ha utilizado otras dos vías para posicionar sus productos: el e-commerce y la ‘marca México’.
El empresario supo fusionar su origen familiar en la orfebrería con su educación superior. En 1987 se mudó a la Ciudad de México para estudiar Administración de Empresas en la Unitec y, poco después, comenzó a comercializar la joyería originaria de Taxco. Al asistir al JCK, una feria del sector en Las Vegas, se dio cuenta de las grandes posibilidades de ese negocio y decidió convertirse en diseñador. Para lograrlo continuó sus estudios en Gemología, en California, estudió Historia del Arte en Florencia, recibió cursos de Moda y Mercadotecnia en Holanda y aprendió Estrategia de Mercadotecnia en joyería en Nueva York.
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“Ha picado mucha piedra, porque hay mucha competencia y un joyero necesita buenos contactos y mucho trabajo. Su éxito es una combinación de creatividad, gestión y un estándar de calidad que trasciende fronteras, porque no cualquiera llega el nivel de calidad como para que en Hollywood te usen”, dice Paulina García consultora de moda. Hoy actrices y personalidades como Blake Lively, Salma Hayek, Paris Hilton y Lucero portan los diseños del mexicano.
Ahora tiene nuevos planes. Como parte de los festejos de su 21 aniversario, abrirá un museo-taller interactivo en el primer trimestre de 2019. “Tenemos el reconocimiento de todas las celebridades que han portado y que siguen portando la marca, tanto para alfombra roja como para eventos, y eso permite, a través de ellas, exponenciar el conocimiento de la marca y que se hable de este México fabuloso que tenemos”, finaliza.
