Este es el impuesto que le pone piedritas a las telecom en México
CIUDAD DE MÉXICO.- Cada vez que usas los servicios de telefonía en cualquier ciudad del país, pagas un 3% de impuesto adicional al costo del servicio contratado. Si tu recibo de telefonía fija llega al mes por 389 pesos, 6.90 pesos corresponden al Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS). Si tu consumo es constante, al año pagas 83 pesos más por el mismo servicio.
Según las cifras de la Secretaría Hacienda y Crédito Público (SHCP), entidad responsable de la recaudación del IEPS, desde su implementación en telecomunicaciones en 2010 este impuesto solo ha superado la recaudación prevista en dos ocasiones: en 2011 cuando llegó a 8,332 millones de pesos (mdp), aunque se esperaba una recaudación de 7,213 mdp; y en 2013 cuando Hacienda recaudó 7,220 mdp y esperaba 6,568 mdp. Los otros seis años, el impuesto no ha cumplido con las expectativas del organismo.
Sin embargo, para los especialistas consultados, el cobro del IEPS a los servicios de telecomunicaciones es un contrasentido, ya que este gravamen nació con el objetivo de inhibir el consumo de algunos productos como bebidas alcohólicas, cigarros, confitería, refrescos, juegos con apuestas y sorteos, entre otros, mientras que las telecomunicaciones están consideradas en la Constitución como un derecho desde el año 2013.
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También lo es para la senadora Minerva Hernández, que el 10 de marzo presentó una iniciativa para eliminar el IEPS con el objetivo de promover la inclusión digital y la productividad.
Varios especialistas en telecomunicaciones coinciden en que este impuesto es un freno no solo a la inclusión digital sino al desarrollo económico. “Las telecomunicaciones tienen un efecto multiplicador en el Producto Interno Bruto: cuando crecen, lo hace también la actividad económica que genera ingresos fiscales por el consumo de una variedad de servicios que se producen a partir de las telecomunicaciones”, explica María Elena Estavillo, excomisionada del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT).
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) señala que con un incremento de 10% en la penetración de banda ancha –un servicio de telecomunicaciones- “lleva asociados incrementos de 3.19% en el PIB y de 2.61% en productividad”.
La senadora calificó como “un total contrasentido” que mientras el artículo 6 de la Constitución establece los derechos de acceso a las tecnologías de la información y comunicación y a los servicios de telecomunicaciones, la Ley del IEPS grave la prestación de los mismos.
“Tan es evidente este contrasentido que, de 2014 a 2018, la recaudación anual del IEPS por este concepto ha sido negativa, pues dejaron de ingresar a las arcas los más de 13,760 millones de pesos que estaban previstos durante este periodo en las respectivas leyes de Ingresos”, dijo Hernández en la presentación de su iniciativa.
Para Jorge Negrete, presidente de la consultora Digital Policy & Law Group, señala que hay entre 30 y 50 millones de mexicanos que no han podido acceder al uso de las tecnologías de la información. "Está demostrado en los países que pertenecen a la OCDE que los impuestos especiales a los únicos que afectan es a las clases económicas más desfavorecidas”, señala.
“El (cobro) del IEPS es contradictorio, porque las telecomunicaciones ya son un derecho que está en la Constitución. Si se quita, veríamos un movimiento en la demanda entre los sectores socioeconómicos más bajos”, estima Gonzalo Rojon, socio director de la consultora The Competitive Intelligence Unit (CIU).
La iniciativa ya pasó a la Cámara de Diputados, donde aún está en análisis en la Comisión de Hacienda.
Todo en contra
Este impuesto tiene argumentos constitucionales, fiscales y sociales en contra pero se sigue cobrando, dice Estavillo. “El IEPS no se está reinvirtiendo en proyectos de telecomunicaciones, no es una medida efectiva que recaude para después invertir”, agrega Jesús Romo, analista de Telconomía. Por ejemplo, durante la administración pasada, la meta de sitios que ofrecen internet gratuito se fijó en 250,000 y solo se conectaron efectivamente 101,000; es decir, en este servicio de telecomunicaciones no se vio la eficacia de la aplicación del impuesto.
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Son las personas de bajos ingresos las que más afectadas se ven con el cobro de este impuesto. “Al cobrar este impuesto están causando un daño patrimonial; si lo quitan, la nación va a dejar de percibir es ingreso pero va a crear un bienestar social, más gente podría estar conectada a través de la tecnología”, destaca Sandra Rodríguez, directora de Jurídica en Telecomunicaciones.
Incluso la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) rechaza el cobro de este impuesto. El 30 de agosto de 2017 recomendó “eliminar el IEPS que actualmente se aplica a los servicios de telefonía móvil y televisión restringida, como una medida para estimular el acceso y el uso de dichos servicios”, según el ‘Estudio de la OCDE sobre telecomunicaciones y radiodifusión en México 2017’.
“Definitivamente, la eliminación del IEPS puede ayudar a la adopción de servicios de telecomunicaciones, no drásticamente pero es un impulso. Generaría un movimiento en la demanda de servicios”, dice Rojon.