Alsea quiere llevar los restaurantes Vips a aeropuertos y centrales de autobuses

“Ya tenemos un Vips en terminal 1 de la Ciudad de México, dos en Tijuana, dos en Hermosillo y uno en La Paz. Próximamente abriremos un formato de bar en uno de los dos que tenemos contemplados en Hermosillo, será el primer Vips Bar. Ese en particular lo estamos diseñando para el aeropuerto porque tenemos que tener un poco de velocidad en la preparación de platillos, porque el cliente tiene un ritmo diferente”, comentó Javier Toussaint, director general de Vips México.

Parte del plan de la compañía es aumentar sus sucursales en estos centros, por ello Vips se encuentra en proceso de licitación para operar en dos aeropuertos, señaló el directivo sin dar más detalles.

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Además, la firma está próxima a abrir el primer restaurante en una Central de Camiones en la Ciudad de México bajo el esquema de franquicia. La compañía también decidió utilizar el modelo de franquicia para entrar en las estaciones de camiones al norte de Veracruz y en San Cristobal de las Casas, Chiapas. Actualmente tienen ocho tiendas trabajando bajo este modelo.

La cadena, que llegó en 1964 de la mano de Jerónimo Arango, se planteó desde 2016 un plan para remodelar sus 283 unidades en el país con una nueva imagen y menú. Hasta el momento ha renovado 100 y el próximo año pretende hacerlo con 30 o 40 unidades más, el plan es completar todas la unidades en los próximos dos años y medio.

La inversión para cada unidad ronda entre los seis millones de pesos (mdp) hasta los 18 mdp, dependiendo del tamaño de cada restaurante, pues van desde los 400 metros cuadrados hasta los 1,100 m2.

Vips representa el 15% de las ventas globales de Alsea y desde que el grupo lo adquirió en 2014, la rentabilidad de la cadena de restaurantes ha crecido entre 5% y 8%. A la semana cuenta con un millón de transacciones con un ticket promedio de entre 115 y 125 pesos por persona.

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“Fuimos muy afortunados hace cinco años de caer en las manos de Alsea porque pertenecemos a un grupo restaurantero de calidad global. Vips era menos del 1% de las ventas del dueño anterior (Walmart), los restaurantes no eran su foco. Así que desde hace cinco año decidimos mejorar e iniciar estos procesos de renovación de la marca”, añadió Toussaint.

Parte de este cambio implicó el cierre de 20 unidades que no eran rentables, pero fue un paso hacia atrás para tomar impulso y abrir alrededor de 40 más en 2020.

Una renovación total

La primera cadena de restaurantes en México llevaba un tiempo perdiendo el brillo, así que el equipo decidió cambiar desde las cocinas, en dónde se ha logrado reducir el espacio hasta en un 30% para que los restaurantes tuvieran más espacio para los comensales. También se compró nueva maquinaria que ayudó a reducir los tiempos de preparación hasta en un 20%.

La compañía ha innovado en el menú con la introducción de entre 50 y 70 platillos nuevos al año. Y como parte de su nuevo formato están introduciendo el grab and go (pide y lleva) en el área de cajas, en dónde sirven café, donas, sándwiches o snacks preparados como jícama o pepino para las personas que tienen prisa.

Como parte de la nueva imagen también está el del cambio de empaques que se utilizan para la entrega a domicilio. La firma lanzará un empaque 100% compostable hecho a base de fécula de maíz a finales de este mes en Mérida, Yucatán.

Y trabaja en otras inovaciones. “Estamos desarrollando un popote compostable, la energía que utilizamos es eólica, toda la luz de nuestros restaurantes es led, así que estamos comprometidos con el medio ambiente”, señaló Toussaint.