La Comer logró crecer sus ventas durante el primer trimestre del año, aún sin el efecto de las compras de pánico que elevaron los ingresos de todas las cadenas de supermercados el año pasado. Los ingresos de la minorista entre enero y marzo ascendieron a 6,613 millones de pesos (mdp), que representan un incremento de 6.9% contra el mismo periodo del año anterior, aunque su utilidad neta cayó 12.5%, a 375 mdp.
El retailer considera que estos resultados se deben a que en el mismo periodo del 2020 se produjo un abastecimiento extraordinario por el inicio del COVID-19. Aun así, todas las regiones y categorías presentaron números positivos, sobre todo la de perecederos, pues la estrategia de la empresa consistió en mantener una diferenciación de surtido en esa sección.
Según su reporte financiero enviado a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), las ventas en las tiendas con más de un año de operación (y, por tanto, comparables) tuvieron un crecimiento de 5.9%, y fue la región occidente del país la que reportó los resultados más favorables. Sobre el Ebitda, La Comer obtuvo un flujo operativo de 693 mdp, es decir, un incremento del 3.6%.