Pfizer y su socio alemán BioNTech solicitaron la aprobación total del gobierno de Estados Unidos para su vacuna contra el COVID-19 y tienen como meta producir de 4,000 millones de dosis el próximo año, principalmente para países de ingresos bajos y medios.
La aprobación completa de la vacuna, que hasta ahora ha sido autorizada con carácter de emergencia, podría ayudar a superar las dudas de gente en Estados Unidos y otros países ricos. Pfizer también señaló las nuevas y mayores previsiones de fabricación como prueba de su capacidad e intención de atender a los países más pobres que han recibido muy pocas dosis de su vacuna hasta ahora.
En una carta enviada a los empleados de Pfizer, el presidente ejecutivo de la empresa, Albert Bourla, dijo que la compañía ya tiene acuerdos o está en conversaciones con países para suministrar 2,700 millones de dosis este año, de las cuales se espera que el 40% se destine a países de ingresos medios y bajos.