La segunda ola del COVID-19 llegó a México, precisamente, durante el primer trimestre del año, ocasionando un nuevo confinamiento en gran parte del territorio nacional. Esto se vio reflejado en el bajo dinamismo del sector. Cabe recordar que las medidas de sana distancia que se establecieron en 2020 comenzaron en abril, es decir, a partir del segundo trimestre del año.
En este sentido, la fuerte caída de la actividad turística, registrada por el Inegi durante el periodo de enero-marzo de este año, tiene que ver con que en el primer trimestre de 2020 sí hubo actividades abiertas, mientras que el segundo gran confinamiento de la pandemia llegó justo en el primero de 2021.
Esto explicaría también la fuerte contracción del Consumo Turístico Interior, especialmente en el componente de Consumo Turístico Receptivo, el cual experimentó una caída del 51.8% con respecto al mismo trimestre del 2020. Este indicador nos muestra cuál fue el consumo de los turistas que llegaron a México desde el extranjero.
Por otro lado, al interior del Indicador Trimestral del Producto Interno Bruto Turístico, el rubro de Bienes Turísticos descendió 4.1% y el de los Servicios cayó 0.5% frente al trimestre previo. Mientras que, en su comparación anual, estos componentes tuvieron caídas del 24.9% y 22.8%, respectivamente.
Se espera que el segundo trimestre de 2021, las cifras para el turismo mexicano tengan una considerable mejora. Así lo sugiere, por ejemplo, la última cifra de las Encuestas de Viajeros Internacionales del Inegi , donde se registró un incremento del 99.53% en el número de visitantes internacionales que ingresaron al país durante junio, en su comparación anual.