Ayer, el director de la estatal, Octavio Romero Oropeza, supervisó la capacitación de los empleados y los avances de las obras en dichas terminales, que en una primera etapa tendrán una capacidad diaria para llenar 4,800 cilindros de 20 y 30 kilogramos.
Hasta ahora, Pemex no ha dado a conocer el modelo de negocio, ni los empleados que serán parte de su nueva filial. Con Gas Bienestar, la administración federal pretende aumentar la competencia en la distribución de gas licuado de petróleo.
De acuerdo con lo anunciado, la filial de Pemex comenzará operaciones en septiembre próximo en la alcaldía Iztapalapa. La estatal ya ha lanzado una convocatoria para sumar empleados a la nueva compañía, que fue anunciada por el presidente en julio pasado.
Gas Bienestar es la segunda medida con la que la administración pretende reducir el aumento constante en los precios del combustible, después de haber puesto precios máximos en la venta al público del gas.