El nuevo presidente interino del IFT recuerda que el sector de las telecomunicaciones no siempre fue autónomo. Antes de su creación en 1999, año en que Javier Juárez inicia su carrera en la industria, existía la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel), órgano desconcentrado de la entonces Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), cuyo organismo solo se le limitó a emitir opiniones sobre concesiones, sanciones o algún tema que no fuera vinculante para la Secretaría. Pero los comentarios nunca eran tomados en cuenta.
La reforma de telecomunicaciones y radiodifusión de 2013 y la creación del IFT –dice Juárez Mojica– marcaron un parteaguas para la industria, al permitir que un organismo autónomo marcara las reglas del sector para generar un ambiente de competencia. Pero a casi 10 años de la reforma de telecomunicaciones, el órgano descentralizado se enfrenta a un debilitamiento paulatino.
El IFT ha tenido recortes presupuestarios en los últimos tres años. De 2018 a 2021, pasó de 1,998 millones de pesos a 1,510 millones de pesos, lo que representó una caída de 24.4%. La disminución en su gasto anual llevó al órgano regulador a plantear la cancelación o aplazamiento de proyectos en 2020 para ajustarse a lo que le fue asignado.
Además, el órgano regulador enfrenta una crisis de recursos humanos. Tres comisionados terminaron su gestión dentro del IFT -Gabriel Contreras, Mario Fromow Rangel y Adolfo Cuevas- y hasta ahora no el Ejecutivo no ha cubierto las plazas vacantes de comisionados para que el Pleno del IFT pueda operar de manera correcta.
Juárez Mujica recuerda que "las decisiones relevantes que se toman en materia de regulación, de sanciones, de otorgamiento de concesiones, no recaen en un presidente nombrado por el Senado ni en un presidente que esté ejerciendo interinato por suplencia, sino que requieren de la decisión colegida del Pleno del Instituto”.
Por eso el nombramiento de dos nuevas comisionadas es clave. El presidente Andrés Manuel López Obrador a pesar de haber celebrado tres reuniones con el anterior presidente interino del IFT, Adolfo Cuevas, y contar con los cinco perfiles que le envió el Comité de Evaluación en diciembre del año pasado, aún no da señales para designar a las dos comisionadas que faltan en el Instituto.
“Tenemos que defender la autonomía del IFT. (Eso es lo que nos garantiza) no estar tomando decisiones según la coyuntura política, sino que sean ajenas a cualquier interés económico. Cuando haces eso nos lleva a cumplir con el mandato del desarrollo eficiente de las telecomunicaciones y la radiodifusión y eso está relacionado con el beneficio de los usuarios y de las audiencias”, aseguró el comisionado presidente interino.
El nuevo presidente interino comenta que, pese a que el Pleno se queda con solo cuatro comisionados, el IFT sigue operando de manera efectiva gracias al cambio del estatuto orgánico que entró en vigor el viernes pasado, con lo cual podrán emitir resoluciones, otorgar concesiones, emitir medidas de preponderancias para los agentes económicos en telecomunicaciones y radiodifusión, entre otros.
“Estamos en esta situación de suplencia pero la responsabilidad es la misma, las atribuciones que tiene el Pleno del IFT son las mismas y seguimos trabajando en la agenda que definió en enero y que cada año se define, y no porque seamos sólo cuatro comisionados son menos válidas las resoluciones”, advirtió.
Juárez Mojica presidirá el 9 de marzo su primera sesión ordinaria en donde abordarán temas relevantes para la industria de las telecomunicaciones que se apuntala a ser una de las más relevantes para el futuro próximo con el desarrollo de 5G en el país, cuya tecnología es la punta de lanza para otros sectores.
