Información interna de la compañía da cuenta de que la tendencia continuó durante mayo, con compras en el extranjero por alrededor de 235,000 barriles al día. La cantidad es muy similar al promedio de importaciones que reportó durante 2017, cuando se vieron los primeros efectos de la apertura del mercado.
Para 2019, los privados ya tenían una tercera parte del mercado y durante el año pasado las compañías distintas a Pemex se hicieron por momentos de 50% de la importación del combustible.
Pero en los últimos meses, la petrolera ha crecido de nueva cuenta la cantidad de combustible que importa y con ello, su presencia en el mercado. Durante abril pasado fue la responsable de 70% de las importaciones de diésel.
¿Por qué suben las importaciones de diésel?
Pemex aumentó las compras pese a que ha crecido la producción de combustible dentro de sus refinerías. También en abril produjo 182,000 barriles diarios de diésel, la cantidad más alta desde el primer semestre de 2017, de acuerdo con los registros de la estatal. Esto se ha dado como parte de la estrategia por aumentar el uso de los complejos de refinación.
Desde marzo pasado, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) implementó un estímulo fiscal complementario para contener la presión inflacionaria resultante del aumento en el precio de los energéticos. Ahora, el gobierno federal aplica un estímulo complementario para quienes importan o almacenan gasolina y diésel.
Pero los analistas apuntan que el proceso burocrático de la recuperación de los costos –mediante el estímulo– está desincentivando la importación por parte de las compañías privadas.
El gobierno federal también ha endurecido las medidas para la importación de petrolíferos, lo que ha resultado en una menor cantidad de gasolinas y diésel internados al país por parte de empresas distintas a Pemex.