Hino, una de las principales filiales de Toyota Motor Corp, falsificó los datos de emisiones de algunos motores desde al menos 2003, más de una década antes de lo que se había indicado con anterioridad, según demostró el martes una investigación encargada por la empresa.
El comité de investigación encargado por el fabricante de camiones y autobuses Hino Motors Ltd achacó el escándalo a un entorno en el que los ingenieros no se sentían capaces de desafiar a sus superiores, en una rara crítica a la cultura empresarial en Japón.
El comité, compuesto por abogados y un asesor corporativo, fue creado por Hino este año tras admitir haber falsificado datos de emisiones y de rendimiento del combustible de cuatro motores. Sus conclusiones, publicadas el martes, detallan una atmósfera inflexible en la que era difícil que el personal se sintiera "seguro psicológicamente", dijo el comité en un informe.