“No puedes tener equidad en la operación del mercado si no tienes equidad en la distribución de esos insumos, y es algo que está pasando en términos de espectro”, advierte Ernesto Piedras, director general de la consultora The Ciu. "Además, México tiene aproximadamente entre 35% y 40% del espectro que la Unión Internacional de Telecomunicaciones recomienda como estándar internacional y ahora los operadores están regresando parte de este insumo".
Este año, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) ha lanzado la consulta para la licitación IFT-12, en la que se buscarán vender bandas idóneas para 5G. Sin embargo, la reciente devolución de espectro al Estado por parte AT&T pone en entre dicho si la compañía presidida por Mónica Aspe buscará adjudicarse nuevo espectro, en caso contrario, el único jugador que sí adquirirá más bandas será América Móvil. Esto le dará una mayor ventaja para sus competidores en términos de infraestructura y para servicios de nueva generación.
Dentro de la Consulta Pública, que habilitó el IFT, sobre la efectividad de las medidas asimétricas que se le han impuesto a América Móvil desde 2014, algunos de los comentarios que se han publicado señalan que a la empresa controlada por Carlos Slim, además de prohibirle su entrada a la televisión restringida, se le debe ‘bloquear’ de licitaciones para evitar que “acumule más espectro radioeléctrico, de forma directa e indirecta”.
Expertos consultados por Expansión coinciden en que frenar la adjudicación de más espectro a América Móvil sí podría formar parte de sus nuevas medidas asimétricas, a la par que se debe incentivar la participación de más competidores en las licitaciones para equilibrar la distribución de la infraestructura.
“Pero no es solo que no participe América Móvil, sino cómo hacer que el resto de los operadores participen en las licitaciones de espectro”, apunta Jorge Moreno Loza, abogado de telecomunicaciones y titular del despacho de Expanzione.
Los especialistas aseguran que la predominancia de América Móvil en el sector móvil está asociada a que el órgano regulador de las telecomunicaciones no ha vigilado de manera "efectiva" que la compañía de Carlos Slim cumpla a cabalidad con las medidas asimétricas que le fueron impuestas.
La semana pasada, recuerdan los analistas, Telmex, empresa subsidiaria de América Móvil, "se salvó" de una infracción por incumplir con la divulgación de información acerca de su infraestructura en 2017, y cuya falta obligaba al regulador a imponer a la compañía una multa que habría superado fácilmente los 20,000 millones de pesos.
IFT explicó que aún con las pruebas y defensas aportadas al expediente del caso, no fue posible entrar al análisis del fondo de la conducta finalmente imputada a la compañía, ni concluir sobre el incumplimiento y, por lo tanto sancionar a la empresa.
“Soy de la idea de que la mejor forma de operar (a una empresa) no es castigando a los operadores, pero si un operador incumple con el marco legal que tiene impuesto, pues le toca una sanción. Pero aquí (en el caso de Telmex) simplemente (el IFT) le borra de un plumazo esa sanción. Entonces sí se hace muy sospechoso y preocupante para la industria”, comenta Piedras.
En los primeros tres años de aplicación de medidas de preponderancia hubo avances importantes: para 2017 la empresa controlada por Carlos Slim pasó de 66.1% a 60.1% de participación de mercado, una reducción de seis puntos porcentuales. Entonces los analistas estimaron que sólo se requerirían ocho años para lograr un equilibrio en el mercado de telecomunicaciones.
Pero desde que se hizo esa primera medición, la efectividad de las medidas para reducir la preponderancia de América Móvil se ralentizó: entre 2017 y 2021, el nivel de participación solo se redujo en 4.3 puntos porcentuales.
Los especialistas consideran que si bien no se retirarán del país las empresas que operan en el sector, será muy complejo que puedan llegar nuevos competidores. Pero el principal riesgo es que no haya una verdadera regulación de mercado.
“Si no se aplican las reglas no habrá competencia y al día de hoy al IFT se le está saliendo de las manos el control del mercado... Y el principal riesgo es que el IFT pase a ser solo un espectador”, advierte, Moreno Loza.