El Aeropuerto Internacional de Cancún –administrado por Grupo Aeroportuario del Sureste (Asur)– fue el que mejor desempeño tuvo el año pasado, con una utilidad operativa de más de 9,035 millones de pesos, un 68% superior a la de 2021. Con ello, el complejo ganó más de 3,600 millones de pesos en utilidad operativa en el periodo, el mayor incremento en términos absolutos.
Varias terminales de Grupo Aeroportuario del Pacífico (GAP) también tuvieron un buen desempeño, con crecimientos por arriba de 40% en utilidades operativas, que en el año acumularon entre 2,000 y más de 3,000 millones de pesos.
Para los especialistas, los resultados responden a una recuperación de la demanda aunada a mayores costos por efectos inflacionarios, entre otros rubros.
Para Alejandra Marcos, analista de Intercam, el incremento en el tráfico de pasajeros de Asur, aunado al alza en ingresos aeronáuticos y no aeronáuticos, dejaron un periodo de utilidades en un ejercicio, donde, además, se pudieron controlar rubros como el gasto operativo. “En lo que respecta a los costos y gastos resultaron menores en 8%. Por lo tanto, se observa una expansión en los márgenes de utilidad”, explica.
Otros grupos aeroportuarios tuvieron buenos resultados incluso ante un incremento de costos, beneficiados de los ingresos comerciales, aquellos provenientes de establecimientos como restaurantes y duty-free.
“Aunque habíamos subestimado significativamente la solidez de los ingresos comerciales del operador aeroportuario mexicano durante el trimestre, el costo de los servicios también resultó más alto de lo esperado”, dijeron en un documento Stephen Trent y Filipe Nielsen, analistas de Citi.
La expansión de las utilidades se dio incluso para aeropuertos que no se habían podido recuperar la pandemia, como los del portafolio de Grupo Aeroportuario del Centro-Norte (OMA).
“OMAse vio favorecido por una importante demanda de viajes de turismo y de negocios” dice Brian Rodríguez, analista de Monex, quien considera que habrá una completa recuperación del sector aéreo este año aunado a una mejora operativa en Monterrey, cuya utilidad de operación creció un 165% en el año.