La decisión se da aun cuando la compañía había señalado que trasladar sus operaciones de carga a un nuevo aeropuerto pondría en peligro su modelo de negocio en México.
“Tenemos fuertes compromisos con nuestros clientes para brindar nuestra solución en el AICM (…) Operar en dos aeropuertos diferentes para la actividad de pasajeros y carga definitivamente ocasionaría confusión y costos adicionales en volumen, que podrían comprometer la viabilidad de nuestras operaciones cargueras a México”, dijo Marsoin en un comentario sobre el anteproyecto de decreto enviado a través de la plataforma de la Comisión Nacional de Mejora Regulatoria (Conamer) el pasado 19 de enero.
En un comunicado, la compañía dijo que tomó la decisión “después de un minucioso estudio de caso”. La división se convierte en la segunda en anunciar la reubicación de sus operaciones, luego de que la alemana DHL comenzara a operar en el AIFA a finales de febrero.
Las aerolíneas cargueras tienen hasta el próximo 7 de julio para reubicar sus operaciones desde el AICM hacia otro aeropuerto, en un proceso donde el gobierno ha incentivado a las aerolíneas a considerar el AIFA.
Sin embargo, las empresas han advertido que el plazo otorgado –de 108 días hábiles– es insuficiente, pues el proceso requeriría de seis meses a un año. Por ello, empresas como Mas Air, Air Canada y AeroUnion se opusieron a la propuesta, sin que resultara en un ampliación significativa del periodo para salir del aeropuerto capitalino.