El fabricante ha colaborado con marcas de moda de lujo como Dior y Louis Vuitton, así como con celebridades no deportivas como los músicos Travis Scott y Kanye West. Son un ejemplo de cómo este tipo de alianzas entre marcas deportivas y celebridades del arte o la música, representan una convergencia entre un producto para las masas y la alta moda. Para el directivo, este fenómeno también fue una oportunidad para que los tenis deportivos saltaran de las canchas a las pasarelas y ceremonias de premiación.
A principios de 2021, el prototipo Nike x Yeezys que Kanye West usó en los Grammy de 2008, se convirtió en el primer par de tenis en venderse en más de un millón de dólares.
“A lo largo del tiempo, estas piezas adquieren un valor intrínseco que es monetizable”, dice Ytzia Belausteguigoitia, cofundadora y CEO de Troquer, una plataforma que comercializa artículos de segunda mano de marcas de lujo.
Esta semana, el par que Michael Jordan usó durante un encuentro de la temporada "The Last Dance" en 1998 fue vendido en una subasta en línea, organizada por Sotheby's, por un récord de 2.2 millones de dólares para artículos deportivos. Se trata de las Air Jordan 13 que fueron usadas por el basquetbolista durante el segundo partido de la final de la NBA de esa temporada, lo que las convierte en uno de los artículos más significativos de su carrera y de su último año con los Chicago Bulls.
“En los últimos cinco años, ha habido una explosión de coleccionistas que gastan mucho dinero en zapatos y tenis", añade Belausteguigoitia.
Datos de eBay, la plataforma a través de la cual se vende ropa y calzado de segunda mano bajo el modelo de subasta, muestran que esta categoría creció 40% en los últimos dos años, impulsado por la venta de sneakers que en algunos casos son catalogados como “únicos”. Entre los modelos más comprados en su plataforma están los Air Jordan 1 High, de Jordan x Dior, y los Air Jordan 1 Retro High OG x Off-White.
El modelo Air Jordan 1 High de Jordan x Dior, del que en 2020 solo se pusieron a la venta 13,000 pares en todo el mundo (5,000 reservados para los clientes más fieles y 8,000 cuya compra fue sorteada entre 5 millones de personas interesadas), con un precio de entre 2,000 y 2,200 dólares y que hoy se revenden a un precio que supera los 12,000 dólares en plataformas que comercializan productos de lujo, como Farfetch.
Otras marcas han seguido el ejemplo de Nike y han lanzado sus propias colecciones limitadas, como los tenis Balenciaga con una silueta similar al clásico modelo Chuck Taylor de Converse, pero extremadamente rotos y sucios. La casa de moda lanzó al mercado 100 pares de cada uno de los cuatro modelos de esta colección, a un precio inicial de 42,000 pesos.
Algunos de estos modelos se han elevado a “piezas de arte” que permanecen “nuevos y sin usar", con el objetivo de revenderlos o exhibirlos como posesiones preciadas, como una escultura o una pintura.
Para Belausteguigoitia las narrativas o los temas, que muchas veces trascienden a las marcas, pueden hacernos sentir conectados con momentos culturales que marcan a una generación o una época. “Estas colaboraciones, que se venden en ediciones limitadas, revalorizan el objeto, le quitan la parte aburrida, lo básico y vuelven a darle vida por un tiempo finito”, apunta.
