“El Instituto ha enfrentado una disminución desde 2014 a la fecha de una disminución cercana al 40% en términos reales y este año estaríamos solicitando un presupuesto parecido al del año pasado (2023)”, refirió Javier Juárez Mojica, presidente comisionado del IFT, a pregunta expresa por Expansión en entrevista con medios.
“Ahora tendremos que esperar a ver cómo evalúa (la propuesta) Hacienda, que es la encargada de determinar cuánto presupuesto se le destinará al IFT”, añadió.
Desde el comienzo del sexenio, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha mostrado su desacuerdo con la tarea de los organismos autónomos como el IFT, a quien incluso ha amagado con su desaparición. En 2020, Ricardo Monreal, coordinador parlamentario de Morena en el Senado, propuso fusionar a la Cofece con el IFT para disminuir el gasto de ambos reguladores. Aunque la iniciativa no avanzó, sí se convirtió en un factor de inestabilidad para el regulador de las telecomunicaciones.
Además, el IFT actualmente enfrenta una crisis de recursos humanos. Desde 2020, el Instituto ha trabajado con dos presidencias interinas, la primera con Adolfo Cuevas, con la que se gestó un ambiente de desconfianza al verse implicado en la propuesta de Ricardo Monreal de desaparición del regulador. Y ahora con Juárez Mojica, que previo a su designación el Pleno del Instituto, realizó una sesión de emergencia con la finalidad de modificar el estatuto orgánico para continuar sus sesiones con sólo cuatro comisionados de los cinco que requería como mínimo.
Hasta ahora se mantiene la incertidumbre sobre la asignación de las vacantes que se requieren, pese a que el año pasado el regulador interpuso a una controversia constitucional por la falta de comisionados.
Hacer más con menos
El presidente comisionado del IFT explicó que la reducción del presupuesto ha orillado al Instituto a operar bajo la filosofía de "hacer más con menos", con la cual ha buscado opciones para no afectar su operación. Una de las soluciones que ha encontrado ha sido el dejar de arrendar uno de los edificios donde antes se laboraba -sin precisar el nombre y ubicación del inmueble, cuya acción ha representado un ahorro de 80 millones de pesos.
La incertidumbre en términos presupuestales que se ha gestado dentro de la actual administración también ha llevado al IFT a pensar en agilizar la automatización de procesos como “implementar trámites sin intervención humana con el machine to machine”.
Al cuestionar si la automatización de procesos supone un riesgo para los puestos de trabajo, el presidente comisionado aseguró que no contemplan reducir su plantilla laboral y en su lugar se busca que el personal realice otras tareas.
