“Volaris ha puesto en marcha un plan de acción para mitigar las afectaciones derivadas de esta situación, el cual incluye, entre otras medidas, la extensión de 18 contratos de arrendamiento de aeronaves que vencían en 2024 y 2025, la incorporación de 24 nuevos aviones Airbus en los próximos dos años, así como la búsqueda proactiva de más aeronaves y motores”, añadió.
Pese a ello, señaló que considerando que las revisiones de los motores llevarán periodos prolongados, es “previsible” un ajuste temporal en sus operaciones.
Volaris dijo en un comunicado que, con el objetivo de afrontar dicho ajuste, ha tenido que asumir la disminución de aproximadamente 200 plazas. "A petición de nuestra Representación Sindical, se ofreció y alcanzó un acuerdo laboral con los empleados objeto de esta medida, en términos de beneficios superiores a los establecidos en la normatividad vigente”, agregó.
Una vez que pase la coyuntura y se recobre la capacidad de flota, aseguró que dará preferencia a dicho personal en los procesos de recontratación.
A mediados de septiembre, varias compañías aéreas y proveedores del sector aeroespacial advirtieron que la revelación por parte de la empresa estadounidense RTX de un raro defecto de fabricación podría dejar en tierra cientos de aviones Airbus en los próximos años.
El último problema se refiere a un raro defecto en el polvo metálico que podría agrietar algunos componentes de los motores y viene a sumarse a una serie de problemas de durabilidad a los que se enfrentan los motores.
RTX, antes conocida como Raytheon, advirtió entonces que tendrá que retirar entre 600 y 700 de sus motores turbofán con engranajes (GTF) Pratt & Whitney de los aviones Airbus A320neo para someterlos a inspecciones de calidad entre 2023 y 2026.