La comisión gubernamental rusa encargada de este tipo de operaciones "dio el visto bueno al acuerdo", indicó Denis Manturov, el vice primer ministro ruso encargado de la Industria, según la agencia Ria Novosti.
Inaugurada en 2010, la fábrica de Hyundai en San Petersburgo había interrumpido su funcionamiento en marzo de 2022, con el argumento de que tenía problemas con el suministro de componentes desde el inicio de la guerra de Ucrania, a finales de febrero de 2022.
Las ventas del fabricante surcoreano cayeron en Rusia, donde vendió 45,000 vehículos en 2022, lo que representa cerca de un 75% menos que el año anterior, según datos de la Asociación Europea de Negocios (AEB, según sus siglas en inglés). Según la misma fuente, Hyundai apenas vendió seis vehículos en agosto en Rusia.
Desde el estallido de la guerra de Ucrania y la adopción de distintas baterías de sanciones económicas contra Moscú por parte de países occidentales, varios grupos automovilísticos abandonaron el mercado ruso, desde Volkswagen y Toyota a principios de este año hasta Nissan y Renault en 2022. En cambio, los fabricantes chinos (Chery, Chang'an, Omoda...) ganaron una gran presencia en el mercado ruso.