Estas son las mezclas que la estatal envía al extranjero –que se clasifican con base en su densidad y porcentaje de azufre– y de las que obtiene una gran fracción de sus ingresos:
Crudo Maya
Los activos de producción mexicanos se distinguieron en los últimos años por contener crudo pesado, al que comercialmente se le ha denominado como mezcla Maya.
Pemex había basado la mayoría de sus exportaciones en este tipo de mezcla que es mayormente demandada por las refinerías al sur de Estados Unidos, que están diseñadas para procesar la densidad de este hidrocarburo. El crudo Maya, según información de PMI Comercio Internacional –la filial de Pemex dedicada a la comercialización–, tiene mayores rendimientos en la producción de gasolina y diésel en esquemas de refinación simples.
La estatal envía el crudo Maya desde los puertos de Ciudad del Carmen, Campeche; Dos Bocas, en Tabasco; Salina Cruz, Oaxaca, y Pajaritos, Veracruz. La mayoría de este petróleo es exportado a las refinerías del Golfo de Estados Unidos y Europa.
El Maya ha representado este año 60% de los envíos de Pemex a otros países, de acuerdo con la información de la estatal hasta octubre pasado. El porcentaje ha disminuido en los últimos años a medida que la producción de petróleo pesado también se ha reducido en el país y los condensados –un tipo de hidrocarburo muy ligero– ha ganado mercado en la producción total.
En 2022 el crudo Maya representó 70% de las exportaciones y un año antes 82%.
Esta mezcla es la que más barato se cotiza en el mercado. En octubre pasado se vendió en 69.7 dólares por barril.
Crudo Istmo
La estatal suspendió la exportación de este tipo de petróleo –uno más ligero que el anterior– en mayo de 2018 como parte de las medidas del anterior sexenio para aumentar el rendimiento de lo producido en las refinerías nacionales, que funcionan de mejor manera con esta variable, y así reducir sus pérdidas.
Pero la actual administración retomó los envíos al extranjero en diciembre de 2019 a medida de que la producción de éste aumentaba en los campos y debido también a que éste tiene una mejor cotización en el mercado que el petróleo Maya. El crudo Istmo se vendió en octubre en 72.91 dólares por barril, según datos de la estatal.
En 2020 apenas se enviaron 140,000 barriles diarios de crudo Istmo. Ya para este año, con datos hasta octubre, esta cifra aumentó hasta 589,000 barriles al día. Es decir, las exportaciones de éste se multiplicaron por cuatro en la última parte de la administración federal.
Para dimensionar, en 2020 el Istmo representó 12.5% de las exportaciones, ya para este año este porcentaje subió hasta 42%, impulsado también por una mayor demanda en el extranjero.