Inditex, la empresa propietaria de Zara, Bershka y Massimo Dutii, duplicó con creces sus beneficios antes de impuestos en China el año pasado, a pesar de que la cadena de moda redujo su presencia física, cerrando una quinta parte de sus tiendas en el país, en una señal de que su apuesta por las ventas por internet está dando sus frutos.
El gigante minorista de origen español ha ido reduciendo su presencia en tiendas en todo el mundo en los últimos años, tratando de optimizar su espacio de venta centrándose en establecimientos emblemáticos en ubicaciones privilegiadas y aumentando las ventas por internet.
De los 123 cierres netos de tiendas en todo el mundo el año pasado, 50 se produjeron en China, mostró el informe anual de Inditex el jueves. En 2019, Inditex tenía 570 tiendas en China, su mayor presencia física después de España. El minorista ahora tiene 192 hasta el 31 de enero de este año.