El objetivo del grupo es situarse en el top tres mundial en este sector y el año pasado anunció un impulso en su producción para llegar a 3.6 millones de modelos eléctricos para 2030.
Con esta inversión de 68 billones de wones, que equivalen a 50.5 millones de dólares, anunciada el miércoles, Hyunday quiere "garantizar los futuros motores de crecimiento en un entorno empresarial incierto a través del cambio y la innovación constantes", dijo.
"El sector de la automoción, que incluye los productos de movilidad futura, representa (...) un 63% de la inversión total del grupo", agregó.
El plan implica la creación de 80.000 empleos en Corea del Sur y la construcción de tres nuevas fábricas de vehículos eléctricos para aumentar la producción nacional de estos modelos a 1,51 millones de unidades en 2030.
La estrategia de electrificación del grupo también incluye inversiones en infraestructura, software, tecnología de baterías y conducción autónoma.
Un informe de Greenpeace publicado en noviembre dijo que el aumento de ventas de vehículos deportivos de Hyundai había neutralizado cualquier avance medioambiental generado por su transición eléctrica.
La organización subrayó que el grupo Hyunday-Kia había incrementado en más del 150% las ventas de modelos SUV en la última década.
Este tipo de vehículos que mezclan las características de un todoterreno y de un turismo emiten aproximadamente un 12% más de dióxido de carbono que las berlinas, dijo el grupo medioambiental.
Al publicarse ese informe, Hyundai explicó que estaba ampliando su gama de "vehículos SUV totalmente eléctricos" como los Kia EV6 y EV9.