"Pedí un importante cambio de diseño en la parte frontal" dijo a mediados de julio, asegurando que el tiempo adicional permitiría presentar otras pequeñas modificaciones. "Una vez que demostremos que algo es suficientemente seguro o significativamente más seguro que el humano, veremos que los reguladores respaldarán el despliegue de esta iniciativa", agregó entonces.
Musk tiene antecedentes de fuertes predicciones sobre los vehículos autónomos que, entiende, reeplazarán algún día a los autos convencionales.
El 25 de setiembre presentó el eslogran del evento de lanzamiento We, Robot, en alusión a la obra de ciencia ficción "I, Robot" de Isaac Asimov, publicada en 1950 y adaptada al cine en 2004.
Del resto, poco se sabe, a excepción del lugar de la presentación: los estudios Warner en Los Angeles, que permitirán hacer demostraciones en calles utilizadas para películas.
Algunos observadores vieron camiones de Tesla y tomaron imágenes de un vehículo embalado en un envoltorio amarillo fuerte, que podría ser el camuflaje del robotaxi.
Montaje
El vehículo se llamará Cybercab (cyber taxi en español), y algunos creen que estará inspirado en la silueta del sedán Model 3 de Tesla, lanzado al mercado en 2017. Pero para otros, se parecerá a la pick-up Cybertruck, de líneas rectas y duras, que comenzó a venderse en 2023 con varios años de retraso. Muchos esperan que sea una fusión de ambos diseños.
Pero el camino es largo antes de que entren en funcionamiento. "Pensamos que el despliegue del robotaxi de Tesla a gran escala es improbable en los próximos años", destacan los analistas de UBS.
"Elon Musk acumula una gran 'deuda' por su exageración sobre la disponibilidad de los diferentes productos de Tesla en el mercado, y pensamos que para el robotaxi no será distinto", resumió Garrett Nelson, de CFRA Research.
Los analistas de Wedbush esperan que "Musk&Co presente tecnologías autónomas 'revolucionarias'" el jueves, y destacan que pocas presentaciones son tan esperadas como esta.
La expectativa es tal que la acción de Tesla, muy volátil y en aumento de 48.1% en seis meses, podría derrumbarse si el lanzamiento decepciona, según Nelson.
Vehículos autónomos de este tipo circulan con clientes a bordo en varias ciudades de Estados Unidos desde 2021 a través de Waymo, de Google (Alphabet), y Cruise, del gigante GM.
Waymo tiene una flota de más de 700 robotaxis, todos Jaguar blancos, de los cuales 300 circulan en San Francisco, donde están disponibles para el público.
Cada semana hay 100,000 viajes de hasta cuatro pasajeros por Waymo, presente en Phoenix (Arizona), Austin (Texas), Los Angeles (California), y pronto en Atlanta (Georgia).
En China, los robotaxis se expanden y a precios deliberadamente más bajos que los taxis tradicionales.
GM ha tenido más problemas. Sus actividades sufrieron suspensiones tras varios accidentes en los que estuvieron involucrados sus autos.
Colmados de cámaras y láseres de detección, los robotaxis desatan debates intensos sobre los riesgos que representan.
Autopilot, el sistema de ayuda a la conducción de Tesla, ha sido cuestionado en casos de accidentes mortales.
Los analistas esperan que Musk aproveche la ocasión para hacer anuncios sobre otros proyectos, como el vehículo de bajo costo Model 2, esperado para 2025, o su robot humanoide Optimus, esperado para 2026. También podría hablar del semiremolque Semi o una Cybervan, un robotaxi para una decena de personas.