En medio de la turbulencia para Boeing, el fabricante de aviones, hoy parece tener buenas noticias. Los trabajadores de la fábrica de la compañía en la costa oeste de Estados Unidos aceptaron el lunes una nueva oferta de contrato, poniendo fin a una huelga de siete semanas que paralizó la mayor parte de la producción de aviones y agravó su crisis financiera.
El 59% de los afiliados votó a favor del nuevo contrato, que incluye un aumento salarial del 38% en cuatro años, lo que alivia la presión sobre el nuevo presidente ejecutivo, Kelly Ortberg, después de que dos ofertas anteriores fueran rechazadas en las últimas semanas.