En un comunicado aparte, CUPE criticó duramente la intervención del gobierno, estimando que "premia la negativa de Air Canada a negociar de forma justa, dándole exactamente lo que quería". "Esto sienta un terrible precedente", añadió.
Además de aumentos salariales, el sindicato quiere tratar el tema del trabajo en tierra no remunerado, incluyendo el proceso de embarque.
Trabajo no remunerado
Rafael Gómez, director del Centro de Relaciones Industriales de la Universidad de Toronto, explicó a la AFP que es una práctica común en todo el mundo pagar a los auxiliares de vuelo según el tiempo que pasan en el aire.
Añadió que el sindicato había desarrollado una eficaz campaña de comunicación sobre el tema, generando una percepción pública de injusticia.
Un pasajero promedio, no familiarizado con las prácticas habituales del sector, podría pensar: "Estoy esperando para embarcar y hay un auxiliar de vuelo ayudándome, pero técnicamente no le pagan por ese trabajo", declaró Gómez antes del inicio de la huelga.
Consideró además que las mejoras que puedan lograr los empleados de Air Canada podrían impactar a otras aerolíneas.
Air Canada detalló el jueves una propuesta final de compromiso que aumentaría el salario promedio anual de un auxiliar de vuelo sénior a 87,000 dólares canadienses (USD 65.000) para 2027, pero el CUPE consideró las propuestas insuficientes, especialmente considerando la inflación.
El sindicato también rechazó las solicitudes de la empresa y del gobierno canadiense para intentar resolver las disputas mediante un arbitraje independiente.
"Es temporada alta. La empresa no quiere perder cientos de millones de dólares en ingresos", declaró Gómez.
La economía canadiense, si bien muestra signos de resiliencia, comienza a sentir los efectos de la guerra comercial iniciada por el presidente estadounidense Donald Trump, con aranceles que afectan a sectores cruciales para el país como el automotor, el del aluminio y el acero.
En un comunicado emitido antes del inicio de la huelga, el Consejo Empresarial Canadiense, que agrupa a ejecutivos de más de 100 importantes empresas, advirtió sobre el riesgo de que las dificultades se agraven a raíz de una huelga en Air Canada.
"En un momento en que Canadá se enfrenta a presiones sin precedentes en nuestras cruciales cadenas de suministro económico, la interrupción de los servicios nacionales de transporte de pasajeros y carga aérea causaría un daño inmediato y significativo a todos los canadienses", declaró la organización.