¿Qué son y cómo funcionan?
Las tarjetas de crédito garantizadas son aquellas que piden un depósito en garantía y, sobre ese monto, es el préstamo que te hacen. Como su nombre lo indica, esa es la razón por las que un banco no te las puede negar.
Estas tarjetas garantizadas son de las pocas alternativas con la que los clientes cuentan para rehacer o construir su historial de crédito.
"Es una forma sencilla de lograr que alguien confíe en ti nuevamente sin que te la pueda negar. Le ayuda a la gente que necesita mejorar su score crediticio y a las personas que no tienen historial crediticio, como que nadie te está prestando porque no te conocen, esta es una muy buena forma de darte a conocer", dijo Liliana Olivares, CEO de Adulting.
Los montos que estas tarjetas ofrecen van desde los 2,000 y hasta los 5,000 pesos, es decir, líneas de crédito pequeñas que no descapitalicen a la persona interesada y que permite a las instituciones conocer su comportamiento de pago. En caso de incumplir con los pagos, el dinero se lo queda la institución como garantía.
Una vez que pasan los seis meses de prueba, explica Olivares, el banco te devuelve el monto que diste en garantía.
¿Qué bancos ofrecen tarjetas de crédito garantizadas?
Hay bancos y fintechs que te ofrecen este tipo de plásticos como Hey, Banco o Nu, que recientemente anunció este beneficio . Hey tiene líneas de crédito entre 1,500 y hasta 30,000 pesos.
Nu México informó que este tipo de tarjetas ayudará a que se aprueben más créditos, ya que actualmente se rechazan entre 60% y 70% de las solicitudes para tarjeta de crédito debido a la poca información que hay de los clientes que la piden.
Este tipo de productos financieros nacen en Estados Unidos. "Es el clásico TAC es un invento gringo y así funcionaba y tú podías dar un colateral o una garantía para que el banco te diera una tarjeta de crédito y básicamente eso es lo que hoy en día las fintechs están masificando", dijo Chito Padilla, CEO de Fintonic.
La recomendación de los expertos es que tengas esta tarjeta por seis meses, porque después de ese plazo podrás buscar mejores alternativas que convengan a tu estilo de vida, es decir, una tarjeta que no te cobre anualidad o una que te proporcione puntos o dinero en cash back.
"No tienes porqué seguir financiándote durante más de seis meses. Normalmente las financieras después de tres o seis meses te van a dar una línea no garantizada, comienzas con algo pequeñito y después comienzas a crear tu historial", añadió.