Este viernes, la moneda doméstica se apreció 0.88% frente al precio de referencia de Banxico del jueves a 16.7383 unidades frente al dólar, su mejor nivel desde diciembre de 2015.
En la última semana, la moneda nacional ha ganado 2.37%, además de acumular seis jornadas consecutivas de alzas, un desempeño y una racha alcista continuada que no se habían visto desde marzo.
El fortalecimiento prolongado del peso se ha dado de la mano de una depreciación de la moneda vecina, el dólar.
"Cabe recordar que en la semana, el dólar estadounidense se ha debilitado en 2.02%, ante la expectativa de que la Fed esté cerca del final del ciclo de incrementos a la tasa de interés", dijo Gabriela Siller, analista senior de Banco Base, en una nota enviada a clientes.
Si la Fed detiene su alza de tasas, el diferencial con la tasa de México se mantendría alto, lo que aumenta el apetito de los inversionistas por activos mexicanos, que a su vez provoca un alza en la demanda del peso.
Aunque la contundente apreciación de la moneda mexicana ha sido celebrada por el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, algunos especialistas también han apuntado a los efectos negativos que podría tener esta alza particularmente para las exportaciones y las remesas al país.
Con información de Reuters.