Los mexicanos confían más en las marcas que en el gobierno
Para 71% de los mexicanos, las empresas son las únicas entidades que tienen el poder de impulsar un cambio a nivel nacional. Según datos del Edelman Trust Barometer 2018, estudio elaborado por la agencia global de relaciones públicas, la confianza en las instituciones de gobierno disminuyó 16% en el último año, por lo que en lugar de esperar una mejora por parte de los líderes políticos, los ciudadanos concentran su optimismo en los directores generales de las compañías.
“México es terreno fértil para las marcas. La gente necesita confiar en algo y las empresas pueden ser esas entidades que devuelvan la certidumbre a la sociedad. Tienen que asumir el rol de ayudar a resolver los retos del país, por lo que el silencio no es una opción para las compañías”, aseguró Mariana Sanz, directora general de Edelman México, al finalizar la presentación de la 18 edición del Trust Barometer.
La directiva explicó que los mexicanos cada vez más eligen marcas que coincidan con sus valores y creencias personales. “Si la marca coincide con su forma de pensar, es más fácil que le genere confianza, contrario a aquellas que no se muestran transparentes ni toman postura”, indicó. De hecho, 57% de los consumidores apoyará o boicoteará una empresa según la posición que tome ante un tema político o social.
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“Los mexicanos no solo quieren confiar en los negocios, sino también que les propongan soluciones a problemas nacionales”, mencionó Stephen Kehoe, presidente global de reputación en Edelman. El reto para las marcas, agregó Sanz, es que deben sumarse a movimientos interesantes, tomar un espacio de liderazgo y hablar claro sobre la situación de México.
Baja confianza nacional
Una situación que preocupa a los directivos de la agencia de relaciones públicas es la baja confianza que los mexicanos demostraron en la marca país, que si bien no se traduce en la disminución del consumo, si impide el crecimiento de los productos nacionales. Las cifras del Edelman Trust Barometer 2018 revelan que la confianza en lo que se hace en el país cayó 12% respecto al año anterior.
Esta situación también afectó a las empresas estadounidenses. En el último año, la confianza en lo producido en el país norteamericano cayó 12% como consecuencia de los temas políticos protagonizados por Donald Trump, presidente de Estados Unidos.
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“La baja confianza en los productos de origen es un tema preocupante. Aquí las empresas tienen que asumir el reto de contar sus historias de una forma interesante para que el consumidor se dé cuenta de su valor”, dijo Mariana Sanz.
Respecto a México, la directiva invitó a los líderes empresariales a difundir las oportunidades de negocio que ofrece el país y contar sus historias de éxito internacional. “No estamos viendo a ningún CEO mexicano hablando de las maravillas nacional. Esta es una oportunidad de oro que estamos dejando ir”, concluyó.