Para hacer frente a este escenario, Banamex apostó por una estrategia que moderniza su identidad visual, y que amplía su presencia en el día a día de los usuarios. El rediseño de la identidad respeta el icónico logo, pero introduce una tipografía exclusiva, una nueva paleta de colores y un estilo visual más dinámico. Además, Interbrand trabajó en una versión renovada de la campanada de Banamex para reforzar su presencia sonora.
"Cuando empezamos el proyecto en 2023, sabíamos que el objetivo no era solo redefinir la estética de la marca; era una transformación estratégica que equilibrara su historia con la modernidad", explica Oliver Pacht, director de Interbrand en Latinoamérica.
Pero la actualización de la imagen es solo una parte de la estrategia. Banamex apuesta por fortalecer su presencia digital con una app optimizada, procesos más ágiles y servicios personalizados que reflejen el nuevo rumbo del banco. "El banco no solo tiene que verse moderno, tiene que comportarse como tal", afirma Pacht.
Adicional, como parte de su plan para acercarse a las nuevas generaciones, Banamex está formando alianzas con empresas como Ocesa, a fin de ofrecer beneficios exclusivos y experiencias en eventos que refuercen su presencia en el estilo de vida de sus clientes.
Para Ericka Sigüenza, directora de Padre Brands, el verdadero reto no es solo cambiar la identidad visual, sino demostrar que esta transformación va más allá de la imagen. "Banamex ya no necesita construir confianza; eso lo tiene. Lo que necesita es demostrar que realmente está innovando y que su evolución es más que un cambio de logo", asegura.
A lo largo de su historia, Banamex ha sabido adaptarse a los cambios. Su identidad visual ha evolucionado desde 1975, cuando la firma Walter Landor Associates creó el logo con cinco letras “B” entrelazadas, que representaban las cinco instituciones que formaron Banamex en su transición a la banca múltiple: Banco Nacional de México, Financiadora de Ventas Banamex, Financiera Banamex, Hipotecaria Banamex y Seguros América.
A pesar de que el logo podía confundirse con una flor o un rehilete, fue un diseño que ayudó al banco a diferenciarse en una época en la que las tarjetas de crédito comenzaban a cambiar la forma de manejar el dinero.
El otro gran cambio llegó en 2001, cuando Citi compró el banco y decidió alinear su imagen con la del grupo estadounidense. Banamex pasó a llamarse Citibanamex, adoptó el arco rojo sobre la “t” y ajustó su tipografía y colores para encajar con su nueva casa matriz.
La “flor” siguió ahí, pero perdió protagonismo. Durante más de dos décadas, esa fue la identidad que los clientes vieron en cada sucursal y en sus tarjetas. Ahora, con su regreso como un banco independiente, Banamex se presenta con la promesa "Aquí mismo. Para ti. Siempre", una frase con la que, según Interbrand, esperan que el mensaje trascienda y se traduzca en una experiencia real para quienes han confiado en la marca por años y para quienes valoran la inmediatez y facilidad en los servicios financieros.